¿Por qué?  

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Luis Fernando Caceres Lima


Hay ciertas preguntas que solo en Guatemala inspiran plantearlas. Cuestionamientos de acciones profundamente carentes de sentido y, lo que es más, desprovistas de valor real alguno.

El aeropuerto La Aurora, por ejemplo, provee una buena tajada de muestras. ¿Por qué es que en Guatemala le privan la entrada, en la primera puerta, a personas que no cuentan con pasaporte? Digo el guardia de seguridad solo comprueba la portación de pasaporte, pero eso no implica que la persona vaya a viajar. ¿Qué valor aporta eso? No aporta nada más que dos plazas de trabajo y una cola más? Es más, ya que estamos en eso, ¿por qué es que en nuestro aeropuerto las personas no pueden entrar a dejar a sus seres queridos? Los aeropuertos internacionales lo permiten y el antiguo diseño del nuestro también lo hacía. Pero sigamos. ¿Por qué es que luego de hacer el registro en la línea área en la que se viaja es necesario presentar ticket y pasaporte a un guardia antes de bajar las gradas al piso donde está migración y las puertas de salida? ¿Qué valor puede generar ese puesto —que además de requerir dos personas genera más colas— si a escasos diez metros le van a volver a pedir al pasajero los mismos documentos en migración? De verdad parece que un macaco generó ese flujo. Una tontería tras otra. Más adelante, luego de migración, los pasajeros deben quitarse todo objeto metálico, zapatos y pasar todo eso, más cualquier bolso, por rayos x, más aún, la persona debe pasar por un arco de rayos X y del otro lado es requisado por un guardia. Después de todo esto ¿por qué le hacen al pasajero volver a abrir los mismos maletines en la puerta de salida? En serio qué es una sandez tras otra. Si el primer proceso no es suficientemente riguroso o no tienen personal adecuadamente calificado deben resolver el puñetero problema ahí, en la raíz, pero estos eruditos del caos deben dejar sus decisiones incoherentes para sus casas. ¡Aeronáutica civil es una vergüenza en Guatemala!

No, nos desviemos. Sigamos cuestionando. ¿Por qué es que en Guatemala ponen puestos de registro en las principales arterias de la ciudad en horas pico? ¿Cuál exactamente es el resultado que obtenemos de esta genial idea? Quisiera realmente que las autoridades, que con tanta ligereza deciden poner una patrulla con un grupito de los escasos agentes con los que contamos, expliquen qué valor nos aporta ese acto, que por otro lado hace mucho más tortuosa la llegada al trabajo por la mañana. Robarle a miles de personas media hora más, por el tráfico agregado que causan en un sistema de por si colapsado, es un acto de redonda necedad. Si de verdad lograran constantemente abatir crimen con esa gran cantidad de puestos que ponen viviríamos en una paz comparable únicamente a la de Oslo.

¿Por qué conchas ponen un parqueo para personas con discapacidad —lo señalizan usando una silla de ruedas en el rótulo— y luego no hacen una rampa de acceso?

¿Por qué seguimos teniendo esa cojuda ley que impone el uso de chalecos anaranjados a los motociclistas? Esa iniciativa nació muerta. Legislación que sanciona asesinar y robar existía desde antes, no necesitábamos más legislación, necesitábamos que se hiciera cumplir la existente.

¿Por qué nuestras carreteras siguen pasando por pueblos? Haciendo un vía crucis pasar por esas secciones. Barberena y Chimaltenango son claros ejemplos.

¿Por qué hacemos cosas buenas pero no sostenibles? Por ejemplo, por qué el Transmetro, que ya es subsidiado, ahora perdió lo molinetes de cobro en las estaciones y no cuenta con un proceso de cobranza real. ¿Cómo puede ser sostenible así? Terminará deteriorándose inevitablemente.

¿Por qué seguimos favoreciendo la construcción de vivienda en lugares cada vez más lejos de la ciudad en lugar de hacer una ciudad más densa, como cualquier urbe importante del mundo?

¿Por qué, por qué, por qué?

Si usted tiene otras de estas preguntas que se le ocurran; por favor, envíemelas a luis.caceres@mail.com (mail no Gmail).