Fiscalización, la mejor arma

Astrid PerdomoAstrid Perdomo

Consultora y analista política


A raíz de los casos de corrupción que se destapan, donde los involucrados llegan a hacer una suma impresionante, se ha acaparado la atención sobre los implicados en los casos y el proceso en contra de cada uno ellos y los cargos que muchos de estos ocupaban tanto dentro de la administración pública como de empresas y bancos que funcionan en el país. Lo que ha llamado la atención de muchos guatemaltecos y que a raíz de esto se han indignado y se han interesado por dar seguimiento a lo que está sucediendo, incluso han mostrado su apoyo al Ministerio Público y la CICIG, teniendo claro que sin las acciones que se han hecho esta realidad no sería posible, pero más importante es que este interés no se pierda cuando la atención mediática disminuya, sino que, al contrario, se canalice y encuentre cómo generar sostenibilidad a rechazar que sucedan de nuevo estos hechos abominables que, más allá de la burla, cobraron vidas.

Las últimas semanas han provocado que exista aún más interés por evidenciar y seguir insistiendo en la importancia que tiene la fiscalización ciudadana, muchos de los delitos que se imputan sucedieron bajo nuestras narices, y aunque muchos piensen que están lejos de poder resguardar lo que nos pertenece como ciudadanos, están más cerca de lo que creen.
En los artículos 134 y 135 de la Constitución Política de la República se establecen los deberes y derechos cívicos y políticos dentro de los cuales vale la pena hacer referencia a dos; el primero, trabajar por el desarrollo cultural, moral, económico y social de los guatemaltecos y segundo, participar en actividades políticas, estos parecieran sonar muy fáciles, pero en realidad los debemos asimilar y cumplir.

Todos somos responsables por sensibilizar a quienes no tienen la oportunidad o el interés de involucrarse en los temas de realidad nacional o bien ser transmisores de información, esto nos acercará cada vez más a comprender cómo contribuir al desarrollo del país, porque si entendemos y dialogamos con otras personas sobre lo que sucede, estamos generando un reflexión o incluso encontraremos una postura ante diferentes temas o bien encontraremos el sentido a participar en la política, buscar ideales y encontrar espacios para hacer que estos se hagan escuchar.

Con un mismo interés debemos empoderarnos y fiscalizar al gobierno, se debe aclarar que fiscalizar no significa investigar para encontrar fallas o hechos negativos, fiscalizar también es dar seguimiento a la manera en que se están llevando a cabo los planes, si estos están cumpliendo con su propósito o se ha desviado el objetivo. Según el Diccionario de la lengua española, fiscalizar significa criticar y traer a juicio las acciones u obras de alguien, a esto hay que agregarle que debemos de hacerlo de manera más permanente sobre los gobiernos de turno, para que como ciudadanos conozcamos qué están haciendo y con qué objetivo.

Así mismo, debemos tomar en cuenta que la transparencia del gobierno no debe desalentar la fiscalización a sus acciones, porque la transparencia debe ser un principio fundamental para todo el aparato estatal, en aras de brindar seguridad y certeza a la población, y la fiscalización debe ser un principio de la ciudadanía para generar involucramiento activo; por tanto, fiscalizar es la mejor arma que como ciudadanía podemos tener, e incluso algunas veces la debemos guardar como un arma secreta, pero, al final, siempre debemos ser los ciudadanos que velemos por el desarrollo de nuestra Guatemala, como lo manda nuestra Constitución.