El portavoz Hiemann; no me ayudes, compadre

Errores en sus declaraciones y contradicciones con lo afirmado por el mandatario han marcado el trabajo del vocero presidencial, Heinz Hiemann. En el fondo, según expertos, lo que ocurre es que no existe una planificación y una estrategia de comunicación.


La mayor parte de la vida profesional del vocero presidencial, Heinz Hiemann, ha transcurrido en las ventas, el mercadeo y la coordinación de promociones. Y fue hasta el pasado 14 de enero cuando comenzó a incursionar como vocero presidencial.

En sus primeras acciones dejó en evidencia que el Gobierno había recibido como donaciones medicamentos vencidos y esto lo confirmó, por equivocación, con un grupo de periodistas en Whatsapp que cubren la fuente del Ejecutivo.

En otra oportunidad aseguró que el ahora diputado y exmilitar Herbert Armando Melgar Padilla, quien fue señalado de dirigir un grupo de vigilancia ilegal que operaba en la Secretaría de Asuntos Administrativos de Seguridad, participaba como oyente en las reuniones de Gabinete de Gobierno.

Hasta antes de ello el Ejecutivo negaba que Melgar Padilla, de quién también se comentaba junto con otros dos exmilitares de línea dura asesoraba al mandatario. Sin embargo, lo aseverado por Hiemann fue negado por el vicepresidente Jafeth Cabrera.

A principios de septiembre, durante un acto público del presidente Jimmy Morales, se quedó dormido por unos instantes durante un acto público realizado en el Palacio Nacional de la Cultura. Al ser consultado por los medios de comunicación, Hiemann negó que eso fuera cierto y afirmó que el mandatario estaba reflexionando.

Revista Crónica solicitó una entrevista con el portavoz presidencial desde el pasado 22 de septiembre; sin embargo, esta nunca se concretó, y al abordarlo sobre el tema se limitó a indicar que dejaba que fueran los medios de comunicación y la población quienes evaluaran su trabajo.

Sin estrategia de comunicación

Expertos, e incluso el mandatario, han reconocido que no existe una estrategia de comunicación. Yo sé y acepto que talvez no he tenido la habilidad para poder transmitir toda la información, quizá nos ha faltado una política de comunicación más eficiente, quizá no he tenido la humildad para quedarme callado cuando no debo hablar, dijo Morales durante un acto público el pasado 6 de octubre.

Y está en lo correcto. Ramiro Macdonal, presidente del Círculo de Estudios Semióticos de Guatemala, subraya que no existe un plan de gobierno y menos estrategia de comunicación, simplemente el gobernante está saliendo a decir cualquier cosa sin que exista una planificación u orientación profesional, no saben cómo utilizar la comunicación en momentos de crisis.

Francisco García, asesor estratégico en comunicación, comenta que un vocero tienen que tener la capacidad de entender lo declarado por el mandatario: Tiene que ser el mejor intérprete, asimismo, tiene que tener una inteligencia muy aguda para saber cuáles son los temas más relevantes. Además, debe de tener una personalidad para estar frío bajo el fuego, debe ser alguien que sea capaz, que en medio de una situación complicada esté tranquilo. El portavoz del presidente no ha jugado ese papel, ha sido nada más un puesto simbólico.