EE.UU. insiste en la liberación «inmediata» de Navalni después de su condena a tres años de prisión

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha vuelto a pedir la liberación «inmediata e incondicional» del dirigente opositor ruso Alexei Navalni, después de que un tribunal de Moscú haya hecho efectiva la pena de tres años y medio de cárcel dictada contra él en 2014.

En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, Blinken, que ha trasladado la «profunda preocupación» de Estados Unidos por las «acciones» de Rusia contra el opositor, también ha hecho un llamamiento para que se libere «a todos aquellos detenidos injustamente por ejercer sus derechos».

https://twitter.com/SecBlinken/status/1356665053492219904?s=20

Según ha sostenido, Navalni, «como cualquier ciudadano ruso», cuenta con «derechos previstos en la Constitución rusa». «Y Rusia tiene la obligación internacional de respetar la igualdad ante la ley y los derechos a la libertad de expresión y reunión pacífica», ha agregado en un comunicado en el que ha recordado que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ya concluyó que la condena de 2014 contra el opositor era «ilegal», «arbitraria» y estaba «motivada políticamente».

Procesos

«Los procesos contra Navalni, que comenzaron con su detención el 17 de enero, son parte de una continuación de esfuerzos para violar los derechos de Navalni y suprimir el pluralismo político, según dictó el TEDH previamente», ha remachado.

El ministro británico de Exteriores, Dominic Raab, se ha expresado en la misma línea que Blinken y ha tildado el fallo del tribunal ruso de «perverso». Además, ha censurado que se dirige contra «la víctima de un envenenamiento en vez de contra el responsable del mismo».

A su juicio, el pronunciamiento judicial «muestra que Rusia está incumpliendo los compromisos más básicos que se esperan de cualquier miembro responsable de la comunidad internacional».

Además, en un comunicado que ha difundido a través de la citada red social, Raab también ha reclamado la liberación «inmediata e incondicional» de todos los manifestantes «pacíficos» y periodistas arrestados en las protestas que se suceden desde hace dos semanas en rechazo a la detención de Navalni.

Alemania

Por su parte, el ministro de Exteriores alemán, Heiko Maas, ha tildado la condena contra el líder opositor de «duro golpe para los derechos civiles firmemente establecidos y el Estado de Derecho en Rusia». Como Blinken, ha recordado que el TEDH ya censuró el procedimiento contra Navalni por «arbitrario».

Francia

Por otro lado, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha asegurado que la condena contra Navalni es «inaceptable», antes de recalcar que «el desacuerdo político nunca es un delito». Pidiendo su liberación «inmediata», ha reiterado en Twitter que «el respeto de los Derechos Humanos como el de la liberad democrática no es negociable».

En esos términos también se ha expresado el Ministerio de Asuntos Exteriores de Austria, que a través de su cuenta de Twitter ha recordado que los Derechos Humanos y las libertades fundamentales «deben ser respetados», al igual que los de «los manifestantes y representantes de los medios arrestados en los últimos días».

UE

También el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha censurado el fallo contra el opositor ruso, considerando que va en contra de los compromisos internacionales de Rusia sobre el Estado de Derecho y las libertades fundamentales.

«Va en contra del veredicto del TEDH, que dictaminó que este caso es arbitrario e irrazonable», ha hecho hincapié, pidiendo su liberación «inmediata».

Borrell mantiene el viaje a Rusia previsto para finales de esta semana, pese a las detenciones masivas registradas en las protestas por todo el país de partidarios de Navalni. La diplomacia comunitaria defiende que será una buena oportunidad para abordar de primera mano con el Kremlin la crisis generada por la detención de Navalni y enviar un «mensaje fuerte» de los Veintisiete.

En este sentido, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha zanjado que la UE «no acepta esta sentencia» y ha afeado que la justicia «no debe ser politizada». «Los manifestantes tiene el derecho de protestar pacíficamente y expresar sus visiones políticas», ha agregado.