Ven resultados positivos en la llamada «Cumbre de los tres amigos»

Los gobernantes Biden, López Obrador y Trudeau se reunieron para dialogar en Washington

El balance de la «Cumbre de los Tres amigos» –Joe Biden, Manuel López Obrador y Justin Trudeau– parece positivo para analistas que siguen de cerca el desarrollo de las relaciones entre Estados Unidos, México y Canadá, tres países que forman una región con gran potencial comercial y productivo.

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha instado durante la cumbre a su homólogo estadounidense y al primer ministro de Canadá, a impulsar un plan de producción en América del Norte para «sustituir las importaciones» procedentes de Asia.

López Obrador ha recordado la «acertada decisión» de los países con el tratado de libre comercio entre Estados Unidos, Canadá y México, conocido como TMEC, para apuntar a la necesidad de la «integración económica» como «mejor instrumento» para enfrentar a la competencia «derivada del crecimiento de otra regiones del mundo».

«De mantenerse la tendencia de la última década, en otros 30 años, para el 2051, China tendría el dominio del 42 por ciento del mercado mundial y nosotros (…) nos quedaríamos con el doce por ciento, lo cual, además de ser una desproporción inaceptable en el terreno económico, mantendría viva la tentación de apostar a resolver esa disparidad con el uso de la fuerza, lo cual nos pondría en peligro a todos», ha advertido el presidente al respecto.

Por otro lado, López Obrador ha expresado en la reunión por su «reconocimiento» a Biden por su «compromiso tan claro» e «inequívoco» para «mejorar la situación de los migrantes», una postura que, a su juicio, «ningún mandatario de la historia de Estados Unidos ha manifestado».

Por su parte, Biden ha agradecido a los líderes haber acudido a la cumbre, que no se celebraba desde 2016, y ha remarcado su ambición de «llevar adelante una recuperación, un repunte económico y también manejar los retos de la migración» en la región.

Los tres gobernantes norteamericanos abordaron principalmente los temas comerciales y de migración.

«Como líderes, compartimos un gran potencial que podemos aprovechar con los talentos de nuestras poblaciones. Y hoy en día, es lo que podemos hacer con una alianza, así como demostrar que la democracia puede entregar resultados en la segunda mitad del siglo XXI», ha agregado.

En esta línea, ha abogado por la resiliencia, protección a los trabajadores y la mejora de la ciberseguridad, así como el apoyo a las pymes para «que florezcan en el hemisferio norte», como forma de impulsar la región después de la pandemia.

Trudeau, por su parte, ha insistido en los «vínculos fortísimos de amistad» de los tres países con su «visión, valores y principios» mirando al futuro.

«Nuestra mayor prioridad, por supuesto, es terminar con la COVID-19 y enfocarnos en la recuperación económica, fortalecer las cadenas de abastecimiento e integrar la economía del bloque norte para apoyar los empleos y a la clase media en nuestros tres países, y esto va a ser respaldado por un acuerdo que pueda respaldar los derechos de los trabajadores», ha aseverado.

La cumbre ha acogido este jueves encuentros por separado entre los mandatarios, para concluir con la reunión trilateral sobre asuntos en materia de integración, migración, sanidad y recuperación económica.

La cita, conocida como cumbre de los «Tres Amigos’, no se llevaba a cabo desde 2016, cuando el expresidente estadounidense Donald Trump decidió de manera unilateral suspender estas reuniones bajo argumentos proteccionistas contra el libre comercio.