Unesco denuncia la impunidad de los responsables de asesinatos de periodistas

Cerca del 90 por ciento de responsables de asesinatos de periodistas contabilizados entre 2006 y 2018 en el mundo «no han sido castigados», denunció este jueves la Unesco en un comunicado.

Según un informe de la organización de la ONU para la educación, la ciencia y la cultura, 1, 109 periodistas han sido asesinados durante esos 12 años.

Entre 2014 y 2018, esos crímenes han aumentado un 18% respecto a los cinco años precedentes, asegura el comunicado.

México es uno de los países más peligrosos para los comunicadores, con más de 100 asesinados desde 2010.

Por regiones, Oriente Medio es la más peligrosa, con el 30% del total de muertos, seguido por América Latina y el Caribe, con 26%, y Asia Pacífico con el 24%, precisó la Unesco.

El informe fue publicado porque el sábado se celebra el Día internacional del fin de la impunidad por los crímenes cometidos contra los periodistas.

«Este año, el 2 de noviembre, el Día internacional del fin de la impunidad estará centrado en los periodistas locales. Mediante la campaña #KeepTruthAlive se trata de desmentir la idea de que los asesinatos ocurren lejos de la mirada del público, y que son los corresponsales de guerra los principales afectados» explicó la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay.

Los periodistas de medios locales han representado el 93% de las muertes de comunicadores de los últimos diez años, indicó la responsable.

Entre los actos previstos el sábado 2, en una veintena de países, se llevarán a cabo seminarios en México y en Uganda.

Desde julio, la Unesco administra un nuevo Fondo mundial para la defensa de los medios de comunicación, creado a iniciativa del Reino Unido y Canadá, que anunciaron que dedicarán respectivamente 3 millones de libras esterlinas (unos 3,8 millones de dólares) y 1 millón de dólares canadienses (765.000 dólares). 

El fondo tiene como objetivo «reforzar la protección jurídica de los profesionales y financiar formaciones de seguridad» para los que trabajan en zonas de conflicto.