- La guerra de Ucrania se libra también en el campo de las comunicaciones
Las autoridades de Ucrania han acusado este miércoles al Ejército ruso de lanzar bombas de fósforo blanco en una localidad llamada Novodanilivka, en la región de Zaporiyia, mientras Rusia lo niega desde su embajada en Estados Unidos.
El portavoz de la Administración militar regional, Ivan Arefiev, ha indicado en la red social Facebook que el ataque ha incendiado el tejado de un edificio residencial, pero que nadie ha resultado herido. Los servicios de emergencia ya han extinguido el incendio.
Además, ha advertido de que existe una «gran amenaza» por la posibilidad de que los efectivos rusos utilicen misiles contra las estructuras militares y civiles en toda la región de Zaporiyia, en ataques que podrían intensificarse con el objetivo de avanzar hacia la ciudad homónima.
No es la primera vez que las autoridades ucranianas acusan a Rusia de utilizar armas químicas en el marco de la invasión. La más reciente ha sido la utilización de «una sustancia venenosa de origen desconocido» contra militares y civiles en Mariúpol. Moscú lo niega.
Rusia niega que sus FFAA tengan armas químicas
La Embajada de Rusia en Estados Unidos ha negado este miércoles que las Fuerzas Armadas del país euroasiático cuenten con armas químicas, al tiempo que ha pedido a Washington que no difunda «información errónea».
En un comunicado difundido a través de Telegram, la legación ha precisado que las Fuerzas Armadas rusas «no tienen ni pueden tener agentes de guerra química» porque Moscú «destruyó todos los arsenales ya en 2017».
Por ello, según ha recogido agencias de noticias oficiales rusas, la misión diplomática también ha reclamado a Estados Unidos que «acelere» el proceso de destrucción de armas químicas.
«Estados Unidos sigue siendo el único país parte de la Convención sobre Armas Químicas que no ha cumplido con sus obligaciones internacionales», ha afirmado, remarcando que «el arsenal estadounidense de este tipo de armas supone una amenaza real para la humanidad».
Las palabras de la Embajada rusa en Estados Unidos llegan después de que el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, señalara el martes que Washington está «preocupado» por que Moscú utilice este tipo de armas en Ucrania.
El Batallón Azov acusó el lunes a las fuerzas rusas de utilizar «una sustancia venenosa de origen desconocido» contra militares y civiles ucranianos en Mariúpol. Esta alerta tiene lugar en un contexto en el que el Ministerio de Defensa ucraniano ya ha alertado con anterioridad de la alta probabilidad de que el Ejército ruso emplee armas químicas durante sus ataques.