Rivales republicanos, pero sí apoyarían a Trump

La rivalidad tan marcada que parecen tener los republicanos no es del todo cierta, ya que aunque Marco Rubio y Ted Cruz no han oficializado una alianza, tampoco se desligan del marcado discurso antimigrante que ha protagonizado Donald Trump en la presente campaña. Y a pesar del rechazo que mantienen hacia el empresario millonario, ayer no descartaron apoyarlo si llegara a la nominación presidencial.

El imparable Trump ha dejado atónitos a los estadounidenses, incluso en su país aumentaron las búsquedas en Internet sobre como mudarse a Canadá. La idea es descabellada para varios sectores sociales, una realidad para los medios de comunicación, pero en el caso de los propios republicanos es una incoherencia a su estrategia de rechazo hacia el magnate.

Ayer durante un debate en la cadena conservadora Fox News, los participantes Rubio,  Cruz y John Kasich admitieron que ap0yarían Trump en caso que obtenga la nominación presidencial republicana, la cual parece ser un hecho por los 329 delegados que suma, de unos 1,237 posibles necesario. El camino es largo todavía, pero los rivales del outsider no tardarán en retirar su candidatura si prevalece el paso que impone el virtual nominado republicano.

La división del bando republicano se percibe entre las bases del partido, pero el mensaje central no ha sido olvidado, ya que han transcurrido tras estar 8 años fuera del poder y sin tener un candidato sólido como hasta ahora. Luego les preocupa la inmoderado ingreso de migrantes, hecho por el cual han discutido para saber cuál propuesta será la más recia contra los latinos que en su mayoría ingresan de forma ilegal. Además fiel a su estilo, los conservadores por más diferentes que parezcan en posturas ideológicas, tienen claro que las políticas de Obama han ido en la línea conciliadora y no tanto para buscar la supremacía que ha caracterizado a sus opositores.

Mientras la nominación se hace oficial, el centro de la atención será si optan por una alianza y confirmen las versiones de la fragmentación republicana, o por otro lado termine apoyando a Trump que apaciguaría las críticas sobre el partido opositor. Todo estará por verse luego del supermartes que dejó casi sentenciada la contienda.