MP vuelve a la carga contra proceso electoral; pide retirar antejuicio al Registrador de Ciudadanos

  • Además, solicita información al TSE sobre miembros de las juntas electorales y los digitalizadores. Se anticipa acoso contra líderes del Movimiento Semilla

Mientras la mayoría de la población y la comunidad internacional elogian el resultado y la votación del pasado domingo, el Ministerio Público (MP) volvió a activar el acoso contra el proceso electoral y realiza acciones en contra del Registrador de Ciudadanos del TSE, Ramiro Muñoz, a la vez que solicita información a las autoridades sobre los integrantes de las juntas electorales y los digitalizadores de datos.

Tal como se anticipaba y se había denunciado de diversas maneras, el MP activó hoy varias líneas de investigación con el fin de judicializar el proceso electoral, mientras que se anticipan otras acciones y acoso en contra de líderes del Movimiento Semilla, ganador con amplio margen de las elecciones del pasado domingo.

Según fuentes del propio MP, que pidieron no ser identificadas por temor a represalias, la Fiscalía Contra la Impunidad (FECI) prepara solicitudes de retiro de inmunidad «de varias personas que han sido elegidas a cargos públicos en las pasadas elecciones», aunque no se sabe el motivo de la acusación.

La fiscalía de Delitos Electorales informó por medio de un comunicado de prensa que la solicitud para el retiro de inmunidad al registrador Muñoz, se hizo «por la posible comisión de los delitos de abuso de autoridad con propósito electoral e incumplimiento de deberes». Se trata del caso de la inscripción del partido Prosperidad Ciudadana.

La fuente consultada del MP dijo que «se piensa actuar contra dos o tres partidos, incluyendo el Movimiento Semilla, con el fin de plantear la posibilidad de anular el proceso electoral o entorpecer el cambio de gobierno».

Varios sectores, analistas y el periodista José Rubén Zamora, denunciaron en los últimos días que el MO, a cargo de la fiscal general Consuelo Porras, pretende llevar a cabo un «golpe de Estado judicial», para impedir que Arévalo pueda asumir el 14 de enero.

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Este mismo día el TSE confirmó que ha recibido al menos tres solicitudes judiciales del MP exigiendo que en un plano no mayor de cinco días envíe información sobre los miembros de las juntas electorales –incluyendo sus direcciones para ser notificados– y de los digitalizadores de datos.

Este es uno de los tres oficios que han sido entregados este día ante las autoridades del TSE para exigir la información sobre miembros de las juntas receptoras de votos y los digitalizadores.

Los magistrados del TSE no se han pronunciado aún, pero antes de la votación del domingo, la presidenta del máximo organismo electoral, Irma Palencia, denunció que al menos dos de ellos han recibido amenazas. Indicó la magistrada Palencia que, si el MP solicita que se le retire a ella el derecho de antejuicio, renunciará al cargo.

El acoso judicial del MP contra el proceso electoral se inició después de que Bernardo Arévalo quedara en segundo lugar en la elección presidencial de primera vuelta y se perfilara como favorito para ganar el balotaje ante la representante del sistema de corrupción e impunidad imperante en el país, la candidata de la UNE, Sandra Torres.

Hasta la fecha, Torres no ha reconocido su derrota y los fiscales de la UNE intentan impugnar la elección, aunque la diferencia de votos sea abrumadora. Arévalo obtuvo 2.4 millones de votos, contra 1.5 millones de la candidata aliada del oficialismo.

La jornada cívica del domingo fue aplaudida por los grupos de observadores internacionales, y gobernantes de diversos países se han comunicado con el virtual presidente electo, Bernardo Arévalo, para felicitarlo por el triunfo obtenido en las urnas.

Su victoria se considera un triunfo de la sociedad guatemalteca que ha optado por repudiar la corrupción y la impunidad imperante en el país bajo el gobierno del presidente Alejandro Giammattei.

El mandatario guatemalteco anunció que «al oficializarse los resultados de la elección del domingo» principiará el proceso de transición con el equipo de Arévalo. Sin embargo, en cada una de sus intervenciones ha dejado abierta la posibilidad de que algo pueda suceder.