Massa le dice «mentiroso» a Milei en el último debate antes de las elecciones en Argentina

Con las encuestas que reflejan un empate técnico, los dos candidatos a la presidencia de Argentina sacaron todas sus armas en un debate televisado a todo el país.

Voz de América

Associated Press (AP)

BUENOS AIRES — En un enconado escenario electoral, el ultraderechista Javier Milei y el oficialista Sergio Massa intercambiaron fuertes acusaciones el domingo, sin adentrarse en sus propuestas durante el último debate televisado antes del balotaje del 19 de noviembre que definirá al próximo presidente de Argentina.

Massa, actual ministro de Economía, arrinconó al candidato de La Libertad Avanza al preguntarle “por sí o por no” si iba a instrumentar algunas de las propuestas más controvertidas de su plataforma, como la dolarización, la eliminación de Banco Central, el recorte de subsidios a las tarifas de servicios públicos y los planes de asistencia social y privatización de recursos naturales.

“Sí, vamos a dolarizar la economía”, respondió Milei, quien en el último tramo de la campaña no ha dicho cómo implementará la medida en momentos en que economistas de distintas corrientes han advertido sobre su viabilidad ante la escasez de dólares que afecta a la economía argentina.

El libertario tampoco se explayó el domingo sobre la manera en que pretende sacar adelante uno de los ejes centrales de su programa.

Massa señaló que lo hará “apropiándose de los ahorros de la gente”.

Cuando Milei ratificó: “Vamos a cerrar el Banco Central porque es lo que genera la inflación”, Massa replicó que eso es porque no le renovaron la pasantía en el Banco Central, donde el economista ultraliberal trabajó en su juventud, e insinuó que no pasó un examen psicotécnico.

“Entiendo que estás enojado con el BCRA porque en algún momento te sentiste rechazado, pero no se trata de eso, se trata de ir al abrazo de lo que a uno lo rechaza”, declaró Massa, de 51 años. “Estamos ante alguien que mintió toda la campaña o miente esta noche”, al poner en foco supuestas inconsistencias en la plataforma electoral de su rival, dijo.

“Si un mentiroso dice que alguien es un mentiroso, ese que está siendo acusado dice la verdad. Si vos fueras Pinocho, ya me hubieras lastimado un ojo”, le respondió Milei, de 53 años. “No me vas a condicionar a contestarte por sí o no…sos un mentiroso. Vos nos reventaste los ingresos”, señaló en referencia a las dificultades del ministro para controlar la inflación.

Varias encuestas muestran un escenario de empate técnico, con una leve ventaja para uno u otro candidato, aunque dentro del margen de error, para la segunda vuelta electoral, en la que el peronismo se juega su permanencia en el poder, que ha ocupado mayoritariamente en los últimos 20 años, y La Libertad Avanza, una fuerza joven en el escenario político, amenaza con llegar por primera vez al gobierno.

Tal como se conjeturó antes del debate, la estrategia de Massa apuntó a sacar de sus casillas a Milei, un candidato de lengua cáustica y temperamento iracundo que no está acostumbrado a los debates políticos. El ministro, en cambio, es un dirigente de larga trayectoria que ha ocupado diferentes cargos públicos y ha sido candidato a presidente en otras ocasiones.

Relaciones internacionales, el Papa y la Malvinas

Massa advirtió sobre el impacto para la economía argentina de las posiciones críticas de Milei respecto a China y Brasil, los dos principales socios comerciales de Argentina. En contraste, propuso una diplomacia de “brazos abiertos para todos aquellos países que demanden trabajo argentino”.

Milei sostiene que en caso de ganar, formará una alianza con Estados Unidos e Israel. Adelantó que no se vinculará comercialmente con China porque no respeta las libertades individuales y tildó al presidente brasileño Inacio Lula Da Silva de “comunista y corrupto”.

“Por prejuicio ideológico vas a dejar dos millones de argentinos en la calle”, alertó Massa, quien agregó que el comercio con China y Brasil le representa al país ingresos por 28.000 millones de dólares.

En continuidad con su estrategia ofensiva, Massa recordó los duros términos que utilizó Milei contra el papa Francisco.

“Este hombre trató de representante del maligno al argentino más importante de la historia, nuestro papa. Vamos a trabajar para que en 2024 el papa visite la Argentina”, afirmó.

“Si a la gente le deja tranquila, no tengo problemas de pedir disculpas (al papa). Estamos dispuestos a recibirlo en la Argentina”, respondió Milei.

La figura de la ex primera ministra británica Margaret Thatcher también fue otro de los contrapuntos. Massa le reprochó a Milei su admiración por la ya fallecida dirigente, quien ejerció el cargo cuando tuvo lugar en 1982 el conflicto armado por la soberanía de las islas Malvinas, bajo el dominio británico y que los argentinos reclaman como propias.

“Thatcher es una enemiga de Malvinas, ayer, hoy y siempre. Nuestros héroes son innegociables. Defiendo la soberanía de Malvinas”, remarcó Massa.

Milei reafirmó su admiración por la dirigente británica, pero aclaró que en el caso de llegar a la presidencia continuará con el reclamo diplomático para que Argentina recupere la soberanía de Malvinas.

Inseguridad y corrupción

Con la inseguridad y la corrupción como algunas de las principales preocupaciones de los argentinos, Milei tomó la iniciativa y adelantó que bajo su gobierno “el que las hace las paga”.

Afirmó que “el Estado hace todo mal. Y eso hace que vivamos en un baño de sangre”.

También asoció a Massa con los escándalos de corrupción que salpicaron los dos mandatos de la actual vicepresidenta Cristina Fernández (2007-2015).

«¿Sabes de qué se compone la casta? De políticos ladrones. Los tenés todos con vos. También se compone de empresarios prebendarios, tus amigos. También te reunís con sindicalistas y estás muy ligado a los medios. Te reunís con ellos y discuten sobre cómo se van a repartir la torta”, acusó a Massa.

El ministro negó la acusación e invitó a su rival a presentarse ante la justicia si tiene pruebas.

En la primera vuelta electoral del 22 de octubre, Massa sacó más del 36 % de los votos, generando una sorpresa, ya que Milei era el favorito. El ultraliberal rozó el 30 % y Patricia Bullrich, de la coalición centroderechista Juntos por el Cambio, alcanzó casi un 24 %, para quedar fuera del balotaje.

Para los comicios del próximo domingo, Milei ha pactado el apoyo de Bullrich y ha sido asesorado por consultores del círculo del expresidente conservador Mauricio Macri (2015-2019), aliado de esa dirigente política. Massa, por su parte, recibió el apoyo de fuerzas progresistas y de dirigentes del peronismo que no están alineados con el actual gobierno.

Con anterioridad a la primera vuelta electoral, se celebraron otros dos debates en los que intervinieron un total de cinco candidatos presidenciales.

En el cierre, Milei pidió a los votantes no dejarse llevar por el miedo que intenta instalar su rival en torno a su figura. “Te pido que cuando vayas a votar lo hagas sin miedo, porque el miedo paraliza y si te paralizas beneficias al status quo, ese que nos empobrece”.

Massa, por su parte, reconoció que “algunos no me votan convencidos, sino como vehículo para no elegir un camino que es violencia, odio y daño. Voy a trabajar desde el 10 de diciembre para que no sientan que tiraron el voto”.