Con 56 años de servicio, la Hemeroteca Nacional Clemente Marroquín Rojas es un legado histórico del país que ha brindado vasta información para niños y adultos, desde primaria hasta doctorado; sin embargo, es lamentable el olvido de este importante centro educativo que clama por falta de atención.
Debby Ríos / Crónica
Pese a su valor intrínseco, tiene asignada la inverosímil cantidad de Q14,397 quetzales anuales para fondo rotativo. ¡Sí! Leyó bien, catorce mil trecientos noventa y siete quetzales anuales, que solo cubre el renglón de extracción de basura y telefonía, o sea Q1,199.75 al mes; independientemente de un presupuesto de Q1 millón 3,893 que apenas alcanza para pagar salarios.
Los sueldos asignados a todos sus trabajadores, a excepción del contador y la directora, es de Q2,800 quetzales, y el único beneficio del que ellos gozan es de un día para ir a cobrar su cheque, por lo que los trabajadores han tenido que migrar a otras instituciones dejando a la biblioteca sin personal capacitado para realizar las actividades propias de la institución. Cabe destacar que tres de sus empleados son pagados por la Asociación Amigos de la Hemeroteca.
Creada en 1960, y elevada a Dirección Autónoma, siete años después, por Acuerdo Gubernativo, la Hemeroteca Clemente Marroquín Rojas cuenta con una Reseña Histórica del Periodismo desde 1729, y en honor a la trayectoria y aportes políticos y periodísticos del periodista Clemente Marroquín Rojas, en 1978 se le da su nombre. En el 2003 es declarada por las autoridades del Ministerio de Cultura y Deportes, Patrimonio Cultural de la Nación.
Comenta la directora de la institución, María Eugenia Gordillo, que cuando tomó posesión en el año 2000, la restauración era un tema tabú, pues encontraron pseudo restauraciones realizadas con tape, que como es de todos sabido, se cae con el tiempo y dejan la marca de su paso por el documento; pero también encontró unas burdas restauraciones con papel de china.
Fue hasta 2015 que conseguí nos vendieran materiales a bajo costo, y la Asociación Amigos de la Hemeroteca (AAH) nos lo comprara. Ellos costearon también al primer restaurador, un verdadero restaurador, licenciado en la rama. Pero cuando la asociación dejó de costear su salario lo sometí a juicio del ministro y les dieron la plaza en el departamento de deportes, lamentablemente en enero las plazas fueron canceladas, agrega Gordillo.
Otras carencias
La hemeroteca tampoco cuenta con una maquina digitalizadora. El trabajo de digitalización que hacen es gracias a un escáner que donó Robert Lee, a través de la Universidad de Harvard, hace ocho años, y lo que hace es transformar lo microfilmado a CD, logran hacer 283 en un mes. La directora explica que lo que ellos están haciendo es proteger el acervo que resguardan, porque no tiene el equipo necesario para brindarle a los usuarios lo que tienen digitalizado, mucho menos lo que tienen microfilmado, considerando que esta tecnología es casi obsoleta.
La hemeroteca tiene microfilmado el Diario de Centro América, desde que inicio hasta 2014, y el Diario de La República; todo esto hecho en la máquina que tiene la hemeroteca nacional, una máquina que, por ser aérea, les permite microfilmar libros de todos los tamaños.
Tras la muerte de Paul Doherty, el fundador de la Asociación Amigos de la Hemeroteca, la hemeroteca quedó nuevamente a merced de lo que el Ministerio de Cultura tenga a bien proveerles.
Cuesta mucho que los gobiernos aprecien el valor que esta entidad tiene, los presupuestos se van dejando hasta el último momento para calcular lo que nos pueden ayudar, lamenta Gordillo.
Agrega que el año pasado, en los tres cuatrimestres, hicieron el pedido de las boletas que entregan a los usuarios antes de cualquier préstamo, y en noviembre les devolvieron las tres solicitudes, y no les compraron nada. Nuevamente las solicitaron este año y, pese al inminente riesgo de verse obligados a cerrar, no les dieron las boletas, así que se dio a la tarea de ir personalmente con el ministro de Cultura y Deportes a solicitarlas, fue así como este mes tuvieron sus boletas.
A pesar de la adversidad que padece la hemeroteca, su directora María Eugenia Gordillo ha hecho maravillas de ella, pues cuenta con una sala de lectura debidamente separada del archivo, el cual tiene climatizador para evitar la humedad y de esta manera la preservación y conservación de los mismos sea óptima. Tanto la pared de vidrio como el climatizador fueron donados por Doherty.
En el 2002, con el fin de aprovechar los periódicos deteriorados y conservarlos por más tiempo, implementaron el llamado Archivo Documental, que como su nombre lo indica, es donde están clasificadas por carpetas las noticias según el tema, lo que ayuda a los estudiantes a encontrar con mayor facilidad la información que desean, y ahorra a la hemeroteca prestar los periódicos.
Para nosotros el gobierno pasado sí que fue palabra mayor (…) el único que de verdad nos ayudó fue Dwight Pezzarossi, un muchacho tan gentil y amable, y que al ser administrador de empresas de iniciativa privada puso un gran empeño y nos ayudó bastante, entonces Bellas Artes, el Ballet Guatemala, el Conservatorio, y nosotros enviamos una solicitud para que lo dejaran terminar la gestión y de esta manera no cambiaran las cosas, él ya había firmado los dos contratos de las plazas que tanto necesitamos, pero con su salida nuevamente quedamos en el aire, destaca la directora de la Hemeroteca.
Importantes donaciones
Afortunadamente, la hemeroteca cuenta con un equipo de restauradores de lujo, y cuentan con los materiales necesarios para llegar a finales de año, donados por la Asociacion G&T y la Asociación Amigos de la Hemeroteca. Los periódicos los están restaurando con papel japonés, y la Universidad Francisco Marroquín los invita desde hace varios años a los talleres de restauración que imparten; en el último que aprendieron la técnica de lavado y han podido rescatar hojas que estaban completamente comprimidas, gracias a estos talleres tienen contacto con restauradores de España, Chile, Argentina y otros países, que les ayudan a distancia.
En la actualidad, una de las restauradoras logra rescatar cerca de nueve tomos por mes, una labor definitivamente encomiable, considerando que las máquinas que utilizan para encuadernación datan de 1909.
Pero eso no es todo, la asociación G&T llevó de forma temporal la máquina digitalizadora del archivo de la Policía Nacional Civil, gracias al apoyo de Gustavo Meoño —en ese momento director de la institución— y en las seis semanas que la tuvieron, digitalizaron los primeros cuatro años del desaparecido Diario el Gráfico. Se tiene previsto que por medio de la fundación se logren conseguir los fondos para adquirir una maquina digitalizadora para la Hemeroteca, o ver de qué manera se les brinda el apoyo para que sigan digitalizando su archivo.
Por su parte, el vocero del Ministerio de Cultura y Deportes, Gabriel Leal, comenta que la Hemeroteca tiene asignado un presupuesto de un Q1 millón 3,893, que en su mayoría se gasta en los salarios. Respecto a los Q14,397 a los que hace referencia Gordillo, dice que es el restante, correspondiente al fondo rotativo.
No solo la hemeroteca se ha visto afectada, puesto que a la Dirección General del Patrimonio Cultural, para el presente ejercicio fiscal, le fue disminuido el presupuesto y por orden del juzgado habrá un incremento de 560 quetzales mensuales y 500 quetzales al Bono Navideño, esto conlleva el consumo de recursos presupuestarios en el pago de salarios, que limita la adquisición de insumos, añade Leal.
La digitalización de documentos es vital para guardar la memoria histórica.