Estados Unidos y Guatemala crearán una nueva fuerza de tarea conjunta para protección de fronteras con el fin de detener la migración y brindar seguridad anunció el gobierno guatemalteco.
El país del norte acordó capacitar a miembros de un grupo de trabajo guatemalteco responsable de proteger las fronteras y frenar la migración descontrolada. La oferta se produjo durante una videollamada entre la vicepresidenta estadounidense Kamala Harris y el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei, refiere el Washington Post.
“En seguridad fronteriza, lo que se discutió fue el establecimiento de un grupo de trabajo conjunto para la protección fronteriza”, dijo el canciller, Pedro Brolo. «El gobierno de EE. UU. Ofreció capacitación».
De acuerdo con Brolo, el esfuerzo será encabezado del lado guatemalteco por la División de Puertos y Aeropuertos Fronterizos y precisó que próximamente «estará anunciando la llegada de 16 funcionarios de DHS (Departamento de Seguridad Nacional)» para colaborar con las autoridades locales.
«Pasos ciegos»
El canciller también aseveró que el Gobierno de Giammattei se comprometió a «incrementar» la cantidad de agentes en sus fronteras con México, Honduras y El Salvador, pero «no solo en las aduanas» sino también en los cientos de «pasos ciegos» que existen.
«Estados Unidos, asimismo, se comprometió a ayudará a nuestro país para construir refugios para migrantes retornados, pero que el Gobierno quiere tener una presencia más fuerte en la Unión Americana por la situación actual de llegada de niños no acompañados a la frontera estadounidense. El canciller explicó que por lo menos 233 menores no acompañados, de 700 que cruzan diariamente la frontera, son guatemaltecos.
La charla
En la conversación que sostuvieron Harris con el presidente de Guatemala, la vicepresidenta le dijo a Giammattei que Estados Unidos planea aumentar el alivio a la región del Triángulo Norte (Guatemala, Honduras y El Salvador) y «fortalecer nuestra cooperación» para gestionar mejor el fuerte aumento de la migración en la frontera sur de Estados Unidos.
La conversación, por lo tanto, marcó un aumento de los esfuerzos diplomáticos de Harris para abordar las causas fundamentales de la migración desde la región, un papel que le asignó el presidente Joe Biden el mes pasado.