En proceso de desinflación

La tasa anual de inflación se redujo durante el mes de agosto, al situarse en 1.96 por ciento, contra 2.32 por ciento del mes anterior y 3.7 por ciento de agosto del 2014, lo que se explica por la reducción de precios en los rubros de transporte y vivienda (8 y 7.1 por ciento, respectivamente), analiza el departamento de Economía Empresarial, de la Universidad Rafael Landívar (URL).
Esta oficina académica indica que, en el primer caso, se debe a bajas en el precio de combustibles, entre 25 y 40 por ciento; y en el segundo, en los precios de electricidad y gas propano (13.1 y 47.3 por ciento), aunque el costo de la canasta básica alimentaria es alta (Q3,420 mensuales) lo que representa un incremento de 10.9 por ciento respecto al mismo mes del año anterior.
No obstante, la URL afirma que este comportamiento de los precios muestra que, al igual que otros países del mundo, Guatemala está transitando hacia la desinflación, lo que tiene sus riesgos: el primero es que se puede encarecer el crédito, desestimulando el financiamiento, con la consiguiente baja en la inversión. También puede postergar las decisiones de los consumidores, ante la espera de menores precios para concretar las compras.
La política monetaria ha sido conducida en la última década hacia la reducción de la inflación, y los resultados muestran su éxito. Dado el nivel alcanzado, se debe incorporar entre los objetivos de dicha política el impulso a un mayor crecimiento económico equilibrado, considerando que el fantasma de la inflación se aleja. Con ello, se retomaría la política de desarrollo, que ha estado invisibilizada de la política económica, anclada en conservar la estabilidad macroeconómica, recomienda el director académica de la unidad mencionada, Guillermo Díaz.