El antiviral remdesivir frena el avance de la COVID-19 en monos (estudio)

El antiviral experimental remdesivir ha logrado frenar el avance de la COVID-19 en monos, según un estudio publicado este viernes por el instituto estadounidense de enfermedades infecciosas. 

El experimento preliminar, que aún no ha sido analizado por la comunidad científica, se realizó para completar estudios que utilizan el remdesivir en pacientes hospitalizados infectados por el coronavirus en un amplio ensayo clínico.

El estudio se llevó a cabo en dos grupos compuestos de seis monos a los que se inoculó el SARS-CoV-2, responsable de la COVID-19. 

Uno de los grupos recibió el antiviral remdesivir, desarrollado por el laboratorio estadounidense Gilead Sciences, y el otro no tuvo ningún tratamiento para poder comparar resultados. 

Doce horas después de la inyección del virus, el grupo de monos tratado recibió una «dosis de remdesivir por vía intravenosa» y «una dosis de refuerzo diaria durante seis días», explica el instituto estadounidense en un comunicado. 

Los científicos procuraron administrar el tratamiento justo antes de que la enfermedad alcanzara su mayor virulencia en los pulmones. 

Solamente uno de los monos tratados con el antiviral presentó leves dificultades respiratorias mientras que los seis monos no tratados tuvieron problemas para respirar. 

«La cantidad de virus presente en los pulmones era mucho más baja en el grupo tratado que en el grupo no tratado, y el SARS-CoV-2 causó menos daños en los animales tratados que en los no tratados», indicaron los científicos. 

El antiviral remdesivir es uno de los primeros medicamentos utilizados como tratamiento experimental contra el nuevo coronavirus. Los ensayos clínicos aleatorios se encuentran en una etapa avanzada de desarrollo. 

El portal estadounidense de noticias sanitarias Stat informó que el medicamento había resultado ser muy eficaz en un hospital de Chicago donde están ingresados varios pacientes que participan en esos ensayos. 

El remdesivir se modifica en el interior del cuerpo humano para parecerse a uno de los cuatro elementos constitutivos del ADN, los nucleótidos. 

Cuando los virus se replican, lo hacen «rápidamente y con un poco de negligencia», explica el virólogo Benjamin Neuman, de la Universidad de Texas A&M en Texarkana. El remdesivir podría incorporarse en el virus en una de esas réplicas. El antiviral añadiría al virus mutaciones no deseadas que podrían destruirlo.