La ministra interina de la Presidencia de Sudáfrica, Khumbudzo Ntshavheni, ha informado este miércoles de que el balance de fallecidos por las protestas contra el encarcelamiento del expresidente Jacob Zuma ha ascendido hasta los 276.
Según ha detallado, la provincia de KwaZulu-Natal ha contabilizado 234 fallecidos y la de Gauteng 42. En este sentido, ha detallado que las autoridades sudafricanas han abierto 168 investigaciones por asesinato, 151 en KwaZulu-Natal y 17 en Gauteng, y en la primera región ya se han llevado a cabo 15 detenciones por estos casos, ha recogido el diario ‘The Star’.
Ntshavheni ha destacado que ahora la «estabilidad reina» en ambas provincias y ha remarcado que las fuerzas de seguridad sudafricanas continúan centradas en detener a personas vinculadas con los desórdenes. Hasta ahora, las autoridades han arrestado a seis personas, acusadas de ser presuntamente instigadoras de los disturbios.
Por Zuma
Las protestas estallaron después de que Zuma ingresara en prisión después de que el Tribunal Constitucional le condenara a 15 meses de cárcel por negarse a testificar ante un panel de jueces que está investigando los presuntos casos de corrupción en los que estuvo implicado durante sus nueve años de mandato al frente del país.
Zuma se convirtió así en el primer presidente elegido democráticamente en Sudáfrica que es condenado a prisión desde que el Congreso Nacional Africano (ANC) —partido que encabezó entre 2007 y 2017, cuando fue apartado en un consejo interno por su vicepresidente, Ramaphosa– se hizo con el poder en 1994.
La caída de Zuma tuvo lugar en medio de la indignación popular por el peso de la familia Gupta, de origen indio, en la economía y la política del país africano, acusaciones que fueron recogidas en un informe de la ex Defensora Pública sudafricana –figura equivalente al Defensor del Pueblo– Thuli Madonsela titulado ‘La captura del Estado’.