El Reino Unido cambiará la ley para impedir el acceso a los estadios a los aficionados que profieran insultos racistas a través de internet, aseguro este miércoles el primer ministro Boris Johnson.
En Inglaterra se ha producido una condena generalizada por los abusos racistas recibidos por el trío inglés Marcus Rashford, Jadon Sancho y Bukayo Saka, que fallaron sus penaltis en la final de la Eurocopa ante Italia.
«Condeno y aborrezco totalmente las manifestaciones racistas que vimos el domingo por la noche. Vamos a tomar medidas para introducir prohibiciones de acceso, de modo que si quien sea culpable de racismo ‘online’ hacia futbolistas no pueda entrar a los estadios, sin exenciones y sin excusas», advirtió Johnson.