El gobierno griego autorizó este lunes el regreso a los estadios de fútbol de un número limitado de aficionados a partir de esta semana, y según unas reglas estrictas, después de siete meses a puerta cerrada a causa de la pandemia de coronavirus.
El partido de Liga de Campeones entre el Olympiakos y el Olympique de Marsella del miércoles en El Pireo será el primero afectado por la medida y podrá contar con la presencia de 3,500 aficionados.
El partido de la Europa League entre el PAOK y el Omonia Nicosia chipriota también recibirá público en Tesalónica.
El anuncio de las autoridades griegas sigue al de la UEFA previendo un regreso progresivo de espectadores en todas las competiciones, hasta el 30% de la capacidad de cada estadio en función de las restricciones locales.
Además, uno o dos partidos del campeonato griego contarán con espectadores el próximo fin de semana.
«Llegó al fin el momento para el regreso progresivo de los aficionados, en un primer momento con el 10% de la capacidad de cada estadio y con un número máximo de 3,500 espectadores«, reaccionó la Super League griega.
Los espectadores deberán obedecer un protocolo sanitario estricto durante los partidos. Sólo las entradas vendidas por internet serán aceptadas, los espectadores deberán portar mascarilla, respetar una distancia de 1,5 metros entre ellos, permanecer en la misma localidad y abandonar el estadio en pequeños grupos.