Urgente renovación de la FIFA… CORRUPCIÓN

Detrás del Balón

Amaño de partidos, compra de árbitros, sobornos en la FIFA para la elección de sedes mundialistas y lavado de dinero de dirigentes del fútbol en diferentes continentes, son hechos que obligan a pensar que este deporte necesita de un proceso de limpieza y transparencia.

Carlos María Salvado

Madrid – Nadie duda de que el fútbol sea el deporte más popular del planeta, como tampoco se ignora en este momento que el fantasma de la corrupción ronda sobre muchas federaciones, pero principalmente en torno a la superpoderosa FIFA, que ha dejado de ser un organismo intocable en el ámbito internacional  y ahora está obligada a renovarse.

La salida obligada del suizo Joseph Blatter ha llevado aires de cambio, pero no será hasta las elecciones de febrero próximo cuando se conozca en realidad hasta dónde está dispuesta a cambiar la institución, que intenta poner junto al balón el concepto de fair play (juego limpio), que sus dirigentes ignoraron.

La última buena noticia ha  llegado de la comisión electoral de la FIFA, que negó la inscripción del francés Michel Platini, el suspendido mandamás de UEFA, sobre el que pesan serias dudas sobre su honorabilidad. Aunque su caso será discutido más adelante, al día de hoy no cuenta como candidato a ser el nuevo presidente de la FIFA.

En España, el fútbol sufre precisamente por diversos casos de corrupción o amaño de partidos, que se encuentran bajo investigación. Tampoco ayuda el caso BenzemáValbuena, porque dice poco –al menos hasta el momento– sobre la integridad del deportista.

 

¿Limpieza en la cúpula?

Aún se recuerdan los fogosos discursos de Blatter para impulsar su iniciativa –muy positiva, por cierto– de promover el fair play en el deporte. Lo único, es que se le olvidó que también debía promover que existiera esta actitud de jugar limpio a nivel dirigencial, principiando por él como cabeza de la FIFA.

En vez de eso, la FIFA aprovechó su fuerza internacional para impedir en muchos países que se investigara a la dirigencia del fútbol, siempre bajo la amenaza de que cualquier intervención judicial en este deporte podría provocar una desafiliación y, con ella, quedar el país fuera de las competiciones internacionales oficiales.

Aunque mucho se critica a Estados Unidos por su afán intervencionista, hay que reconocer que ha sido la justicia de ese país la primera que dejó por un lado el temor de un castigo de Mr. Blatter, y destapó la caja de Pandora. La buena noticia es que, además de la persecución penal contra varios dirigentes por lavado de dinero, provocó la reacción del Comité de Ética de la FIFA, que finalmente apartó al presidente y a Platini de sus cargos.

En Nueva York el proceso sigue su curso y, seguramente, algunas cabezas más caerán –hay más de un decenas de implicados directos–, pero hay más anomalías en el ambiente. El último que ha quedado bajo tela de duda es Franz Beckenbauer, de quien se sospecha recurrió a sobornos para ganar que su país, Alemania, fuera la sede del Mundial 2006.

Mientras la FIFA pedía hacia fuera el juego limpio, hacia adentro Blatter ha permitido y hasta promovido todo tipo de acciones cuestionables, como el beneficio de la reventa de billetes de las Copas del Mundo con beneficio para dirigentes, por mencionar uno de los casos menos importantes.

El listado de aspirantes

La atención ahora se centra en quienes aspiran a dirigir la FIFA a partir del 2016.  Viendo de quiénes se trata y conociendo sus antecedentes, podemos anticipar –relativamente– lo que sucederá en el seno de la FIFA y saber si habrá el fair play administrativo. Esta es la lista de candidatos a sustituir a Blatter:

Tokyo Sexwale (Sudáfrica): Es un candidato con pasado político y de corte humanista.  Fue compañero de prisión de Nelson Mandela, aunque es bastante más joven (62 años). Fue miembro del Comité Organizador de Sudafrica 2016 y ha tenido otras posiciones dirigenciales en el deporte internacional. Su mayor problema puede ser la falta de contacto con las 209 federaciones nacionales miembros de la FIFA, que son las que finalmente votan.

Gianni Infantino (Ita-Sui): Este italo-suizo ha logrado, en apariencia, el respaldo de la UEFA, organismo europeo del que ha sido secretario general. Su mayor fortaleza, el apoyo de Europa, puede ser también su debilidad, porque él mismo se identifica con la línea de Michel Platini, su jefe en el organismo continental. Es conocido del público por presidir los sorteos de la Champions League. A sus 45 años representa una nueva generación de dirigentes, pero, al parecer, su debilidad puede estar en no tener contactos más allá de su zona. Se cree que si Platini puede participar finalmente, él declinaría su candidatura. Otro punto débil.

Zico (Brasil): A sus 62 años, este prestigiado jugador de la Verdeamarela apenas empieza su campaña. Aún no tiene los cinco padrinos que se requieren para avalar la candidatura, aunque ese paso podría lograrlo muy pronto.

Chung Mong-joon (Corea): Exvicepresidente de la FIFA, fue suspendido por la Comisión de Ética por 6 años, y aun así intenta llegar a la Presidencia. Se le considera como continuismo de las esferas de corrupción. No tiene fuerza de votos, pero intenta obtener apoyos de las federaciones asiáticas y africanas.

Jerome Champagne (Francia): A pesar de no tener una gran trayectoria dentro de la FIFA, este diplomático francés de 57 años está dispuesto a lanzarse a la lucha por la Presidencia, con el guiño de ojo nada menos que del propio Blatter. Esa es su mayor rémora y por eso no cuenta con apoyo significativo hasta el momento. No habría cambio de fondo.

Michel Platini (Francia): Cuando parecía que tenía la mesa servida para sustituir a su rival Blatter, Michael Platini (60 años) fue suspendido hasta enero próximo por la Comisión de Ética, que investiga el controvertido pago de 1.8 millones de parte del apartado presidente de la FIFA. Aunque los señalamientos empañan su candidatura, no ha decidido declinar aún. El año próximo volverá a conocerse su caso.

Jeque Salaman (Baréin): Su plataforma es la Confederación Asiática y es actualmente vicepresidente de la FIFA. A sus 49 años se muestra con no muchas posibilidades y sigue apoyando a Platini. Si el francés resurge, él se retiraría de la carrera. También pesan sobre su persona acusaciones de haber respaldado represiones políticas

Príncipe Ali (Jordania): El más joven de los aspirantes (39 años), es medio hermano del rey Abdalá de Jordania. Fue uno de los que apoyó la reelección de Blatter en la última elección. Mientras que fue candidato, tuvo el apoyo de la UEFA, que esta vez no se lo concede.

Como puede verse, no hay razones para estar optimistas. La única buena noticia sigue siendo que la era de Blatter ha terminado, pero no hay indicios de cambios profundos en la FIFA.

El sudafricano Tokyo Sexwale, es uno de los candidatos más interesantes para ocupar la presidencia de la FIFA, aunque, por ahora, no cuenta con potencial de votos.