Un tren de alta velocidad (TGV) que unía Estrasburgo (noreste) con París descarriló el jueves por la mañana y 21 personas resultaron heridas, entre ellas su conductor, en estado grave, indicó la prefectura del departamento francés del Bajo Rin.
«Según un primer balance provisional, el accidente, a unos treinta kilómetros de Estrasburgo, dejó «un herido en emergencia absoluta» y 20 «en urgencia relativa», detalló la misma fuente.
Un portavoz de la compañía ferroviaria francesa SNCF precisó que el conductor, «gravemente herido» víctima de un traumatismo dorsal, fue evacuado en helicóptero.
El accidente se produjo a las «07H45, entre Ingenheim y Saessolsheim con 348 pasajeros a bordo», según la prefectura.
El tren circulaba a 270 km/h y descarrilló por el «debilitamiento muy importante de un talud en el sector de Saverne», según otro vocero de la SNCF.
Un TGV ya había descarrilado en 2015 en el Bajo Rin, en Ecwersheim, cuando efectuaba la última prueba de un tramo de la línea de alta velocidad París-Estrasburgo, dejando 11 muertos entre las 53 personas a bordo.