Torres, la ex primera dama que intenta ser la primera presidenta de Guatemala

La ex primera dama Sandra Torres buscará el domingo, por tercera vez, convertirse en la primera mujer en gobernar Guatemala, aunque las encuestas prevén una derrota frente al derechista Alejandro Giammattei, quien aspira a la magistratura por cuarta vez.

Torres, de 63 años, venció con una amplia ventaja a una veintena de candidatos en la primera vuelta electoral de junio, sin alcanzar la mayoría de votos necesarios para ganar en esa fase. 

Ahora, los últimos sondeos rumbo al balotaje del domingo han revertido el favoritismo de la candidata, conocida por su carácter fuerte al punto de ser tachada de autoritaria, y bajo sospechas de corrupción. 

Giammattei, del partido Vamos, tiene 61.1% de la intención del voto, contra 38,9% de Torres, según la encuesta de la firma Prodatos, publicada el 8 de agosto por el diario Prensa Libre.

Torres es postulada por la socialdemócrata Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), que llevó al poder a su exesposo, el expresidente Álvaro Colom (2008-2012), de quien se divorció en 2011 para competir a la primera magistratura. 

Torres intentó eludir una norma constitucional que prohíbe a los familiares del gobernante en turno aspirar a cargos públicos, pero la justicia frustró su primer intento por disputar la presidencia. 

Logró competir en 2015, cuando perdió el balotaje con el actual presidente Jimmy Morales, un comediante que se vio favorecido por su imagen de candidato ajeno a la política tradicional. 

«La población sabe que me he preparado para gobernar, que tengo experiencia y que voy a ir a dar resultados desde el primer día», afirmó Torres en una entrevista con una televisión local. 

Su principal carta de campaña es atacar la pobreza con generación de empleo y el retorno de programas sociales que ella coordinó durante la administración de su exmarido y que emulaban los del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil (2003-2010). 

La pobreza, que alcanza a 59% de los 17,7 millones de guatemaltecos, es uno de los factores que empujan la emigración ilegal a Estados Unidos, además de la violencia criminal. 

Personaje cuestionado

Torres nació el 5 de octubre de 1955 en el municipio de Melchor de Mencos, en el departamento norteño del Petén, una región con vastas áreas controladas por narcotraficantes. Antes de involucrarse en política fue empresaria textil y es licenciada en Comunicación. 

En 2002 se divorció de su primer esposo, con quien tuvo cuatro hijos. Su imagen pública cobró relevancia en el gobierno de Colom por mostrar su carácter firme, que para sus allegados es un reflejo de su compromiso con las clases necesitadas. 

Sectores conservadores la han acusado de haber militado en las guerrillas marxistas durante la guerra civil que vivió Guatemala (1960-1996), algo que ella ha negado.

«Si usted gana la elección no escoja el camino de la intolerancia, el autoritarismo y la represión a sus detractores, como lo hizo» en el gobierno de Colom, declaró recientemente el influyente empresario Dionisio Gutiérrez, uno de los principales detractores de Torres. 

«El pueblo sabe que usted es una política cuestionada y con antecedentes que a cualquier ciudadano deben preocupar», agregó Gutiérrez, quien le recomendó retirarse de la política si pierde la elección. 

Sobre Torres pesa un pedido de la fiscalía para investigarla por sospechas de finanzas ilegales en la UNE durante la campaña de 2015, pero los fueros de la candidatura han evitado el inicio de las pesquisas.

Torres logró que un juzgado ordenara al jefe de la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), Juan Francisco Sandoval, no investigarla ni «acosarla», y también obtuvo una resolución legal a su favor para prohibir al diario El Periódico hacer cualquier tipo de publicación sobre ella, lo cual desató una ola de críticas en su contra. 

Gran gerente

Entre sus promesas de campaña, Torres se ha mostrado contraria a la aprobación del matrimonio igualitario y a la legalización del aborto, ganando aplausos de los sectores religiosos, principalmente de las iglesias cristianas con amplia presencia en el país. 

«He podido conocer a Sandra Torres. Es una gran gerente», declaró a la prensa local el excanciller guatemalteco Carlos Raúl Morales, candidato vicepresidencial de la UNE. 

Morales, con una amplia carrera diplomática, aseguró que aceptó la invitación para acompañar a la candidata al considerar que es una opción viable para el desarrollo del país y porque considera a Torres como «una gran ejecutora».