¿Es Tecún Umán un héroe representativo para el imaginario guatemalteco? Su equivocación en la lucha contra Pedro de Alvarado ha minimizado su papel histórico, muchos cuestionan su papel y su existencia.
Durante la segunda parte del siglo XX, el mítico guerrero quiché, Tecún Umán, fue convertido en un héroe, pero no con las condiciones épicas, sino con errores. Durante mucho se ha discutido su existencia, de tal manera que su figura ha quedado en la duda de la realidad histórica. Sin embargo, pocos hacen lo posible para que su figura sea reinvidicada, ya que, según el imaginario, es la figura de un indio héroe, vencido y muerto.
Crónica conversó con sociólogos, antropólogos y expertos en la figura de Tecún Umán, especialmente de la verosimilitud de su existencia, el papel que ha jugado histórica y literariamente.
El antropólogo Carlos Rene García Escobar, expresa sobre si es necesario conocer su existencia: Creo que no es importante porque se trata de una figura que, según el mito de su creación, mas las crónica indígenas que hablan de su brumosa acción, nada tiene de heroísmo, pues muere en el intento de vencer al invasor. De tal manera que el especialista aclara que se necesita una figura mas emblemática y que reúna características mas holísticas para que represente ideales de todos los guatemaltecos. Y aporta que esa figura no existe todavía.
Por su parte, el sociólogo y escritor Mario Roberto Morales, acota que: Es una nebulosa de héroe trágico, en el imaginario de un pueblo que ignora su propia historia. Parte de esa nebulosa es la noción de un indio tonto que confundió al caballo con su jinete pero al ser lo suficientemente valiente (tonto) como para enfrentarse a un enemigo para él invencible, eso lo hace merecedor de la gloria de ser recordado como nebulosa. En realidad, se le venera más por suicida que por heróico. Los héroes trágicos son los que no logran su cometido, y muren en el intento, y su culto contribuye al derrotismo de sus admiradores. Esto dice desde Cristo hasta el Ché Guevara, pasando por Tecún Umán.
Necesidad de Símbolos
Según los expertos en mitos y leyendas y cultura general, todo Estado nacional necesita la construcción de símbolos cohesionadores que le den legitimidad ideológica entre la población. Tecún Umán es uno de ellos en Guatemala. Como tal, cumple funciones específicas, que deben entenderse en relación con la especificidad guatemalteca.
Para el escritor y doctor en historia, Rafael Cuevas Molina, radicado desde haca varias décadas en Costa Rica, uno de los rasgos de esa especificidad es como hace un Estado nacional para lograr una identidad nacional homogénea (que es lo que han perseguido todos los estados nacionales desde el siglo XIX), en un contexto tan heterogéneo (desde todo punto de vista) como Guatemala, en el que una buena parte de la población (que podemos catalogar, genéricamente como indígena) ha incorporado peyorativamente.
Cuevas Molina señala al respecto de la importancia del héroe y su representación para el imaginario guatemalteco: La respuesta es escogiendo un representante de ese sector, peyorativamente incorporado a la identidad del guatemalteco y transformándolo en héroe. Pero ojo, como se lleva a cabo ese proceso: 1) remitiendo a un pasado mítico, al que los ladinos también se remiten como propio, con el que los indios de hoy no tendrían relación. ¿Por qué no tendrían relación con él? Porque desde entonces el indio se degeneró (teoría de la degeneración del indio), así que aunque es un indio el que se transforma en héroe, es un indio diferente. 2) La forma como se presenta a ese indio mítico es contradictoria y mentirosa en sí mismo, porque se enfrenta a un invasor que, en la práctica, es reinvindicado como antecesor deseable por quienes han construído la identidad nacional guatemalteca: los grupos dominantes del sector ladino.
¿Qué significa Tecún Umán para los guatemaltecos?
Para Cuevas Molina, al héroe lo observan como un héroe sin cuestionarle nada, así como no se cuestionan muchos otros mitos nacionalistas y de otra índole, que le son inoculados a través de múltiples medios, entre otros, la escuela. Mientras que García Escobar agrega que es importante, debido a lo que representa como figura.
En relación a su existencia, Cuevas Molina, enfatiza que a un mito no se le cuestiona su existencia.
Así como en Guatemala, es Tecún Umán, en otros países sucede lo mismo. En Costa Rica, por ejemplo, el héroe nacional es Juan Santamaría, pero tampoco ahí existe plena seguridad de que existiera. Lo que pasa, es que los mitos se construyen, no son constatación de hechos ideológicos que parten de elementos verdaderos o parcialmente verdaderos (en este caso, una batalla en tal y cual lugar), a los que se les agrega elementos convenientes para las necesidades ideológicas de los grupos sociales dominantes que buscan cohesión social, legitimidad y consenso en torno a un proyecto que a pesar de ser el suyo, deben hacer creer que es el de todos.
Morales apunta que sí es importante y apunta que sobre todo es necesario determinar qué fue exactamente lo que hizo y lo que no, pues eso implica dotar de sentido factual a un elemento de la confusa identidad cultural de los guatemaltecos. Saber si existió es tan importante para los chapines, como lo es para los ticos saber quien empujó a Juan Santamaría.
Lo interesante del caso es que el imaginario de Tecún Umán está dentro del discurso oficial, en las escuelas, colegios, universidades, trabajos, los medios de comunicación, entre otros.
Es un personaje que ha inspirado literatura, pintura, música y diversas creaciones de los guatemaltecos.
Miguel Angel Asturias escribió: «Tecún Umán el de las plumas verdes, el de las largas plumas verdes, verdes verdes verdes quetzal de varios frentes.»
La Leyenda
Según diversas fuentes, Tecún Umán fue un gran guerrero y posiblemente el último de los importantes gobernantes quichés. En varios textos prehispánicos se le menciona como vencido por Pedro de Alvarado, durante el combate contra los españoles en los prados del Pinar, es decir en el valle de Olintepeque.
Se le reconoce por su valentía y porque luchó con gallardía, como lo señalan los Anales de los Cakchiqueles. En los Títulos de la Casa Ixquin Nehaib, Señora del Terrotorio de Otzoyá, se relata su encuentro con Pedro de Alvarado, conocido como Tunatiúh. Una de la las imágenes descrita del guerrero quiché es que vestía con plumas de quetzal, además de llevar esmeraldas en el pecho, en la frente y en la espalda.
Tecún Umán atacó a Alvarado y prácticamente voló, con alas que parecían surgidas de su cuerpo y plumas propias. Tras vencerlo, el conquistador señaló que nunca había observado otro guerrero tan apuesto y con plumas tan bellas, en ningún lugar anterior.