La selección española de fútbol se clasificó con brillantez para la ‘Final a Cuatro’ de la Liga de Naciones después de firmar este martes una exhibición de fútbol y goles ante Alemania, a la que arrolló en La Cartuja de Sevilla con un contundente y sorprendente 6-0 en el, sin duda, mejor partido de la ‘era Luis Enrique’.
La ‘Roja’ necesitaba ganar a la tetracampeona del mundo para sacar el billete para la ‘F4’ de octubre de 2021 y para ello no sólo se tenía que agarrar a su mejor versión, la que no había aparecido en las dos últimas ventanas, sino a una mejoría ofensiva. Pero fue capaz de esmerarse en las dos facetas, más una buena disciplina defensiva, ni siquiera alterada por la pérdida de su líder antes del descanso, para entregar una faena de mucho mérito y, sobre todo, ilusionante de cara al futuro.
España dejó una primera mitad para enmarcar con la que aparcó, seguramente hasta el próximo partido, el debate sobre la eficacia ofensiva. Pese a arrancar con alguna duda, el equipo de Luis Enrique se creció con el 1-0 y a partir de ahí terminó arrollando a la tetracampeona del mundo, endeble atrás, gracias a un Morata extramotivado y al ‘puñal’ que fue Ferran Torres, autor de tres goles, y en su centro del campo, borrado fundamentalmente por un descomunal Koke.
El delantero de la Juventus demostró que actualmente atraviesa una de esas épocas suyas de idilio con la portería rival y cabeceó inapelable un saque de esquina muy bien lanzado por Fabián Ruiz, relevo tempranero de Sergio Canales, una de las apuestas para este decisivo duelo. La ventaja tranquilizó a un equipo, que con el paso de los minutos fue creciendo en todas las zonas y que desconectó a un mediocampo de nivel como el formado por Kroos, Goretzka y Gündogan, incapaces de tener la pelota para abastecer con balones al espacio a su eléctrico trío ofensivo formado por Werner, Gnabry y Sané.
De hecho, por el lado del Chelsea, España torpedeó a la defensa germana, salvada, primero por un fuera de juego muy ajustado que anuló el doblete de Morata, y segundo por Neuer, que ya había evitado al inicio del partido que Sergio Ramos encontrase la redención a la noche de Basilea y ‘gigante’ de nuevo en un mano a mano con Ferran Torres, imparable para Max. Sin embargo, en el inicio de los mejores minutos no pudo evitar que los suyos se fuesen al descanso noqueados.
La lesión de Ramos no altera
Otra jugada que comenzó por el lado derecho esta vez acabó en el izquierdo. Gayà, de vuelta y hasta entonces poco participativo en ataque, lanzó un preciso centro que Dani Olmo cabeceó al larguero, pero el rechace le cayó a Ferran Torres que remató inapelable a la red. Alemania, ni siquiera pudo reaccionar, porque enseguida recibió el 3-0, en otro saque de esquina, esta vez rematado a la perfección por Rodri Hernández. La contundencia en el marcador al descanso y la alegría en el fútbol local sólo se vieron empañadas por una nueva lesión, la de Sergio Ramos, reemplazado por Eric García.
Tras el descanso, el panorama sólo cambió en que los visitantes salieron con más agresividad arriba, pero la noche, y el fútbol, seguía del lado de los de Luis Enrique, que con espacios hicieron aún más grande la herida en la ‘Mannschaft’ el 4-0 fue lo que más rondó. Ferran Torres lo firmó tras la generosidad de Gayà y después de que tanto Dani Olmo como Morata desperdiciasen dos buenas opciones.
El equipo alemán se terminó por venir abajo y quedó a merced de una España que buscó más goles para reforzar una confianza y un estado de ánimo que estaban por las nubes y que hacía ‘volar’ a sus jugadores, implacables en la presión y con una finura de alto nivel en la ejecución de las jugadas. Ferran Torres redondeó su enorme noche con una ‘manita’ que tampoco despertó el orgullo de una Alemania que ni siquiera quiso opositar en el debate de la portería española, salvo con un disparo al larguero de Gnabry.
Con el 5-0 y los cambios, la ‘Roja’ ya bajó el ritmo, pero no perdonó la oportunidad para cerrar, en el mismo escenario donde España logró dos Copas Davis, con un set (Oyarzabal), una noche para el recuerdo que ahora deberá servir de impulso para un 2021 con retos.