Viendo una película de Hollywood en un autocine temporal o con una quema de fuegos artificiales transmitida por Internet, los habitantes de San Salvador sobrellevaron este miércoles de manera distinta la difícil situación que impone la pandemia de covid-19.
Un parqueo contiguo a un estadio de fútbol en el sector suroeste de la capital sirvió para montar el autocine en el que hasta un centenar de familias puedan observar desde sus automóviles en forma gratuita una película, en una iniciativa de la alcaldía de la capital salvadoreña.
Cine sobre ruedas
«La difícil situación que vivimos ante esta pandemia nos llevó a buscar alternativas de esparcimiento para nuestros ciudadanos en la capital, y es así como surgió la idea del cine sobre ruedas», aseguró a la prensa el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt.
Aplicando reglas sanitarias como mantener una distancia de más de un metro entre cada auto y no permitir que las personas abandonen los vehículos más que para acudir al sanitario, la alcaldía mantendrá abierto el autocine hasta el próximo 11 de agosto proyectando una película por las noches en una enorme pantalla al aire libre.
Festejos patronales
Mientras iniciaba la película este miércoles, el cielo sobre San Salvador se iluminó con los fuegos artificiales que la comuna lanzó desde varios puntos de la ciudad, que entre el 1 y el 6 de agosto celebra sus festejos patronales.
Como medida de prevención ante la covid-19, la alcaldía no permitió que las personas vieran los fuegos artificiales desde la calle y optó por transmitir el evento a través de Facebook.
La Iglesia Católica, como parte de sus actividades en el marco de las fiestas patronales, colocó por un corto lapso la imagen del patrono de la capital, el Divino Salvador del Mundo, en la puerta principal de la catedral y transmitió el momento por internet.
Debido a la pandemia, el gobierno salvadoreño ha postergado el proceso de reapertura de la economía ante el incremento de los contagios de coronavirus.
Una primera fase del proceso inició el pasado 16 de junio, la cual permitió la vuelta al trabajo en la construcción y la manufactura textil, entre otros.
Una segunda fase de ese plan debía comenzar el 7 de julio, pero se ha postergado para el 20 de agosto.