Rusia asoma en las internas demócratas de Nevada

En el estado de Nevada, célebre por sus casinos y su paisaje desértico, los demócratas votan este sábado para elegir al candidato que enfrente a Donald Trump, con el favorito Bernie Sanders debilitado por denuncias de una injerencia rusa a su favor. 

En esta tercera cita de las internas del partido, después de Iowa y New Hampshire, Sanders espera consolidar su ventaja antes de la votación del «Súper Martes» del 3 de marzo, día en que votan simultáneamente 14 estados.

«De lo que trata esta campaña, y de lo que tratará nuestra administración, es de asegurarnos de que todos en la nación más rica de la historia del mundo puedan vivir con seguridad y dignidad. Eso no es pedir demasiado», tuiteó Sanders unas horas antes del inicio de la votación. 

Esta cita llega ensombrecida por informes revelados en los últimos días sobre un nuevo intento de injerencia rusa en las elecciones estadounidenses.

Sanders lidera los sondeos con 15 puntos de ventaja en este estado de importante población latina. Sin embargo, las denuncias de que Moscú pretendía supuestamente beneficiar su candidatura podrían socavar su posición. 

Pero este «caucus» también podría darle impulso a otros candidatos, que a medida que avanzan la interna necesitan sumar delegados para poder seguir en la contienda. 

En Nevada, un estado más diverso que los dos que votaron a principios de mes, un 20% del electorado son latinos, y varios de los candidatos buscan beneficiarse, en un momento de la primaria considerado crucial.  

Biden, quien comenzó la carrera como favorito y ahora lucha por mantenerse en la contienda tras unos resultados decepcionantes en las dos primeras instancias, está segundo en las encuestas en Nevada con 16%. El candidato espera un mayor apoyo entre las minorías el sábado.

El estado de su candidatura es precario y un resultado negativo podría ser una debacle, dejándolo con pocas opciones antes de la votación de Carolina del Sur el próximo 29, donde espera sumar delegados. 

Esta cita es igualmente crucial para la senadora Elizabeth Warren, cuya campaña revivió después del debate demócrata del miércoles en el que interpeló duramente al exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg, instándolo a derogar los acuerdos de confidencialidad firmados por su empresa con varias mujeres.

Al igual que Iowa, Nevada organiza unas 2.000 asambleas de votantes que expresarán públicamente su elección de candidato desde el mediodía (20H00 GMT).

Evitar el caos

Después del caos en la publicación de los resultados en Iowa, a principios de febrero, los demócratas de Nevada buscan a toda costa evitar el mismo fiasco al simplificar el método de contar los resultados.

Sobre la base de sus dos excelentes resultados en Iowa y New Hampshire, Bernie Sanders, muy popular entre los jóvenes seducidos por su programa de izquierda, insiste en que la buena participación le favorece.

El viernes, en vísperas de la votación, Sanders fue salpicado por informes de funcionarios estadounidenses que revelaron supuestos intentos de Rusia de favorecerlo. 

El senador por Vermont rechazó la injerencia de Moscú y lanzó un mensaje directo al presidente ruso, Vladimir Putin: «Manténgase alejado de las elecciones estadounidenses, y como presidente, me aseguraré de que usted lo haga». 

Sanders confirmó que los servicios de inteligencia estadounidenses le habían informado de una interferencia rusa en el proceso electoral de noviembre, pero no se refirió a un apoyo específico para su candidatura que informó el Washington Post.

Por su parte, Donald Trump se mostró furioso después de nuevos informes de que los rusos buscaban específicamente ayudarlo a ganar las elecciones presidenciales, lo que denunció ser una «farsa» alimentada por los demócratas «radicales». 

En un tuit burlón el sábado, hizo un llamado a los votantes de Nevada para que «tengan cuidado con Rusia, Rusia, Rusia».

Como un desaire a sus rivales, el multimillonario republicano celebróun mitin el viernes en Las Vegas.

Bloomberg, el gran ausente 

Bloomberg no compite en este «caucus», ya que decidió centrar su campaña en el «Súper Martes», para lo cual se ha gastado más de 360 millones de dólares de su fortuna personal, gestada como magnate de la información financiera. 

La campaña de Bloomberg dijo el viernes que liberaría los acuerdos de confidencialidad de tres mujeres por casos relacionados a denuncias por comentarios hechos por el millonario en el ámbito laboral.

Ya agobiado por las controvertidas acusaciones, el exrepublicano también ha sido criticado por su pobre desempeño durante su primer debate el miércoles. 

«Si eso ocurrió en un debate demócrata, es muy posible que Trump se lo trague», aseguró Sanders en el canal CBS.