El primer caso de corrupción más famoso en la historia reciente de Guatemala vuelve a reiniciarse en Torre de Tribunales. Más de 30 implicados por de defraudación aduanera enfrentarán audiencia que decidirá si van o no a juicio. Esta etapa del proceso penal podría durar al menos un mes.
El juez Miguel Ángel Gálvez ha decidido aplazar la audiencia de manera indefinida. Otto Pérez se quedó sin abogados ya que Cesar Calderón y Mario Hernández no asistieron a la audiencia programada en el Juzgado B de Mayor Riesgo, porque tuveron que atender otros casos. Además el abogado Moisés Galindo, renunció porque el exmandatario tendría una deuda con él. Por esta razón el juzgador tuvo que retrasar la audiencia hasta que los abogados estuvieran en disposición de defender al sindicado.
Hace casi 18 meses se develó el escándalo que terminó con el gobierno de Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti. Ambos tenían un mandato constitucional hasta el 14 de enero de este año, sin embargo, entre mayo y septiembre del año pasado tuvieron que dimitir por un caso de defraudación aduanera que los implicó. El MP y la CICIG los acusa de haberse apropiado de al menos Q28 millones provenientes del fisco.
Analistas en la materia han opinado que esto se trata de una estrategia de los exfuncionarios para seguir retrasando el caso y que puedan salir beneficiados a causa de que el proceso penal lleva año y medio en el juzgado. Por lo pronto, el MP y la CICIG deberán demostrar basados en pruebas si existen las evidencias suficientes para enviar a juicio a los sindicados.
Este lunes 10 de octubre reinició la etapa intermedia, también conocida como apertura a juicio. Es el paso judicial previo a decidir si la treintena de acusados enfrentará o no un debate oral y público ante un tribunal por su aparente implicación en este caso de corrupción. Al igual que en otros casos (Cooptación del Estado y TCQ), el exbimonio vuelven a verse las caras, pero en esta ocasión el escenario ha cambiado, ya que esta parte del proceso puede ser definitiva.