El surcoreano Lim Hyo-jun, campeón olímpico de short-track en los Juegos de 2018, fue condenado este jueves en Seúl a una multa por acoso sexual, tras haber bajado el pantalón de uno de sus compañeros en plena sesión de entrenamiento.
Lim, vencedor de 1,500 metros en los Juegos de Pyeongchang (Corea del Sur), deberá pagar una multa de tres millones de wons (2.267 euros) y realizar 40 horas de terapia por violencia sexual, según un portavoz del tribunal de Seúl, interrogado por la AFP.
La prensa surcoreana precisó que el fiscal había pedido una pena de prisión.
El joven de 23 años, también medallista de bronce de 500 metros en los Juegos de 2018, había bajado el pantalón de entrenamiento a uno de sus compañeros delante del resto de colegas.
Su federación le había infligido castigado en agosto de 2019 con una suspensión de un año, privándole de toda competición.
Corea del Sur es la nación de referencia del short-track, el patinaje de velocidad en pista corta, y los miembros del equipo nacional son estrellas en el país.
Pero la imagen del short-track surcoreano se vio ensombrecida por varios escándalos.
Un entrenador de la doble campeona olímpica de 2018, Shim Suk-hee, fue condenada a 18 meses de prisión por violencia sexual.
También en 2019, un miembro del equipo masculino fue suspendido un mes por entrar de noche en el dormitorio femenino del centro nacional de entrenamiento.