¿Por qué la Feci y el MP quieren debilitar el caso de los Q122 millones y el exministro Benito?

Como sucede en varios casos de corrupción, la nueva Feci se escuda en investigaciones «débiles»

La Fiscalía Especial Contra la Impunidad (Feci), a cargo de Rafael Curruchiche, ha venido debilitando el caso de los Q122 millones encontrados en Antigua en octubre de 2020, y corre el riesgo de que el Tribunal de Mayor riesgo D deseche el caso por las pruebas presentadas, según fuentes del Organismo Judicial.

El caso involucra directamente al exministro de Comunicaciones, José Luis Benito, quien arrendaba la casa en el condominio en Antigua donde se encontraron las maletas con dinero en efectivo, la mayor cantidad incautada en la historia del MP. Por dicha incautación hay una sentencia firme en los tribunales de extinción de dominio, aunque el caso contra Benito no ha prosperado hasta ahora.

Benito se entregó «voluntariamente» a los tribunales en enero de este año, luego de que la fiscal general, Consuelo Porras, destituyera a Juan Francisco Sandoval y desmantelara al equipo de investigación que la Feci mantenía para seguir con todos los casos de corrupción que venía trabajando.

El fiscal Curruchiche fue entrevistado esta mañana en el programa radial «A primera hora», y aseguró que no se trata de debilitar el caso», aunque sus explicaciones no aclararon por qué el juez de Mayor Riesgo D ha tenido que solicitar en dos ocasiones que presente la acusación completa contra el exministro, porque en en ambas se ha visto que no se completan las pruebas.

Curruchiche dijo entonces que en parte se debía a «debilidades»en la investigación inicial que hizo el exfiscal Sandoval, quien en el mismo programa rebatió tal señalamiento.

La prensa «malintencionadamente» ha querido hacer ver que la Feci está encubriendo a alguien (Benito), «pero esto no es así», aseguró el fiscal, quien se amparó en que el caso «está bajo reserva» para no dar detalles del mismo.

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Sandoval, por su parte, negó que hiera deficiencias en el inicio de la investigación, y dio a entender que se estaba tratando de debilitar un caso que lucía sólido contra el exministro.

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Aunque el caso efectivamente se mantiene –a solicitud del MP– bajo reserva, ha trascendido que la investigación original apuntaba a que los Q122 millones eran producto de sobornos que el ministro Benito recibió de parte de constructores, aunque los detalles se desconocen.

Supuestamente ese dinero correspondería en parte al expresidente Jimmy Morales, y se investigaba si de esa residencia salieron los Q20 millones que un testigo (el «testigo A), dijo que constructoras pactaron para financiar la campaña de Alejandro Giammattei a cambio de que se dieran obras durante su gestión a algunas de esas empresas.

Ese era uno de los casos delicados que investigaba Sandoval al momento de ser despedido por la fiscal Porras, a quien se ha señalado por estar obstruyendo la justicia en este y otros casos existentes previamente en la Feci.

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Sandoval dijo en el programa radical que «me llama mucho la atención que nuevamente se recurre a la mentira, a la contradicción y a realizar un montaje cuando se refiere a casos que gestionamos», y reiteró que los pasos que se dieron bajo su dirección aportaron suficientes pruebas.

  • Los rechazos

El Juzgado de Mayor Riesgo D devolvió la acusación que presentó la Feci el pasado 21 de mayo y emplazó al MP para que «complete la documentación». Ayer se presentaron nuevamente los documentos, pero el juez consideró otra vez que estaban incompletos y le concedió un nuevo plazo a la fiscalía especial para que este miércoles entregara la documentación conducente.

En el programa, Curruchiche no quiso comprometerse en asegurar que se cumplirá con lo exigido este día, y simplemente se limitó a decir que «nosotros no protegemos a nadie», al referirse a la situación en que podría quedar el exministro Benito.