Los juniors de Jimmy Morales y Jafeth Cabrera se han convertido en una verdadera pesadilla para el Gobierno. Los hijos del los gobernantes han sido vinculados a casos de corrupción y financiamiento electoral producto del narcotráfico, y ello ha generado un desgaste para un Ejecutivo que no se conduce con certeza en ninguna dirección.
José Manuel Morales y Jafeth Cabrera Cortez tienen en común más que ser los hijos del presidente Jimmy Morales y del vicepresidente Jafeth Cabrera. Ambos se encuentran sindicados de cometer hechos reñidos con la ley y han puesto en serios aprietos al Gobierno de turno.
Las cosas para la errática administración, que no da muestras de liderazgo político y de conducción estratégica del país, se podrían complicar si los juniors son ligados a proceso y, peor aún, si llegaran a ser sentenciados, cuyo caso podría provocar una caída precipitada del Gobierno de turno. De hecho, solo las sindicaciones y el mal manejo de la crisis por parte del Ejecutivo ya le acarrearon un desgaste al binomio presidencial y a su gestión.
El retoño del mandatario es investigado por un caso de corrupción en el Registro General de la Propiedad ocurrido en 2013 —en tiempos de la registradora Anabella De León, quien se encuentra en prisión preventiva—.
Las pesquisas evidencian que dicha institución canceló Q90 mil por la compra de canastas navideñas a una proveedora que no contaba con facturas y cuyos propietarios eran los padres de la novia del hijo de Morales. Ante ello, el hijo del Gobernante consiguió unas facturas por dicho monto de la empresa Fulanos y Menganos.
Mientras el vástago del segundo al mando en el Ejecutivo, Jafeth Cabrera Cortez, le pidió supuestamente US$1 millón (unos Q7.5 millones según el tipo de cambio actual) al narcotraficante Marlon Monroy Meoño, alias El Fantasma, para la campaña electoral del Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación).
Ello, según lo denunció el mismo traficante de estupefacientes antes de ser extraditado el pasado 14 de septiembre junto a su esposa, Cynthia Cardona, a Estados Unidos (EE. UU.).
Al final, según Monroy Meoño, solo le entregó US$500 mil (unos Q3.7 millones) y de ello, dijo, quedó constancia en la cámaras de seguridad de ingreso a su residencia en Santa Elena Barillas, y las instaladas en el interior de la que fue su casa antes de que lo capturaran. La evidencia, se supone, está en manos de las autoridades antinarcóticos de la nación estadounidense.
Cabrera Cortez fue visto en varias ocasiones con la cúpula del FCN-Nación en los actos de campaña. De hecho, fue candidato a diputado y ganó una curul, pero no pudo tomar posesión del cargo porque la Constitución prohíbe que sean parlamentarios los parientes del Presidente o Vicepresidente de la República dentro del cuarto grado de consanguinidad y segundo de afinidad.
Julia Barrera, vocera del Ministerio Público (MP), afirmó que el hijo y hermano del señor Presidente —Samuel Morales—, se encuentran bajo investigación en la Fiscalía Especial Contra la Impunidad.
En el caso del hijo del vicepresidente Cabrera, comenta la portavoz, es un caso que se encuentra en evaluación de la Fiscalía Contra el Lavado de Dinero. Está en una etapa de análisis para determinar si se genera una investigación, subrayó Barrera.
El poder corrompe
Mariano González, analista del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac), considera que el gran problema de fondo, en el caso de los juniors, es la corrupción y el nepotismo, porque nadie elige a los hijos de los gobernantes, pero como se considera que el funcionario puede hacer lo que se le plazca, genera involucramiento de familiares.
Pareciera que la política no funciona como debe ser, porque se elige a un funcionario con la red de amigos y familiares, y esto genera aspectos negativos, dice el experto.
Roxana Ávila, directora del Consejo Regional de Análisis Estratégico (CRAE), resalta que el verdadero problema es que las familias políticas, casi todas actúan de la misma manera. Hijos de Presidentes, candidatos o diputados terminan involucrados porque agarran las mañas de los padres, algunos se componen y salen mejor que los padres, afirma Ávila.
Desde el punto de vista de Ricardo Barreno, analista político independiente, es una lógica en donde los hijos han visto al Estado como un botín político, en donde se pueden concretizar negocios particulares y a ello se le suma que si un familiar tiene un alto cargo, los temas de transparencia se obvian como un ciudadano común.
Desgaste gubernamental
Los señalamientos en contra del hijo del Presidente y Vicepresidente son un golpe duro a la credibilidad del Gobierno, que llegó con el eslogan de ni corrupto ni ladrón; si son declarados culpables, seguramente hasta se pedirá la renuncia del binomio presidencial, subraya Jorge Wong.
Marvin Flores, analista de Acción Ciudadana (AC), asegura que independientemente de que se demuestre culpabilidad o no, en estos casos el daño es palpable en el sentido de que evidentemente le resta credibilidad y legitimidad a un equipo de gobierno en relación a la principal demanda ciudadana que ha existido —lucha contra la corrupción e impunidad— y porque el hecho pone en duda el eslogan de campaña.
El desgaste es directo, porque aunque no son ellos quienes pudieron cometer las ilegalidades, los involucra, debido a que mas allá de que sean sus hijos, es probable que el supuesto dinero que otorgó el narcotraficante haya sido utilizado para la campaña del partido político, enfatiza Flores.
González considera que estas investigaciones empañan al Gobierno, e indica que aunque todavía se mantiene cierta inactividad en cuanto a La Plaza, estas acciones van generando cierto malestar tomando en cuenta que su eslogan era ni corrupto ni ladron, pero que ahora salgan señalamientos de los hijos de los gobernantes, es preocupante y genera dudas. Al menos muchos que iniciaron apoyando al mandatario Morales ya empiezan a tener dudas y sentirse defraudados, porque esto no camina como ellos pensaron y, sobre todo, con las investigaciones que afectarían a los mismos gobernantes.
Panorama sombrío
El inició de las investigaciones ha repercutido fuertemente en la credibilidad de los gobernantes y han perdido, en buena medida, la imagen de transparencia de la presente administración; sin embargo, puede empeorar, dependiendo de cómo prosigan las pesquisas, y, de ser hallados culpables, se podría desbordar el malestar ciudadano.
Barreno asegura que de por sí ya tiene repercusiones sin haberse dictado sentencia o ligado a proceso, y es por la legitimidad que se suponía llevaba el Gobierno.
En este sentido, el analista político comenta que los escenarios no son alentadores; es decir, no se vislumbra una reestructuración interna y eficiente que logre cambios en el Gobierno, sumado a un mal manejo de crisis, por lo que no descarta que la ciudadanía salga a La Plaza a manifestar nuevamente en rechazo a la corrupción. La Directora del Consejo Regional de Análisis Estratégico considera que el gobierno de Estados Unidos apoya a Morales, y eso hace que esté firme en su mandato, por el momento.
Sin embargo, la Directora de CRAE explica que, en el caso de Jafeth Cabrera Jr., se puede complicar, debido a que el Fantasma ha sido extraditado y puede dar información más completa en las negociaciones que tenga con el Gobierno de Estados Unidos, por lo cual esto pondría en mayores problemas a la familia vicepresidencial.
El brother en la cuerda floja
Samuel Morales, hermano del gobernante, también se encuentra en la cuerda floja, ya que es investigado junto a su sobrino —José Morales— por el mismo caso de corrupción.
La relación entre el Presidente y Samuel siempre ha sido cercana, y se sabe que su hermano es uno de sus principales asesores.
De vender plátanos en el mercado de Santa Luisa, al programa televisivo Moralejas, el camino de los hermanos Morales siempre ha estado unido, y la Presidencia de la República no ha sido un impedimento para ellos, en donde se puede ver a un Sammy —como se conoce el hermano del mandatario—, entrar con autoridad a la Casa Presidencial.
Sin embargo, el involucramiento de Sammy en temas de corrupción en el Registro General de la Propiedad es un duro golpe para el Presidente, sumado a que se a involucra a su hijo.
Para el analista político y catedrático universitario Jorge Wong, la presencia de Sammy en el Ejecutivo funciona como un operador político, quien se inmiscuye donde no debe estar. Él abre espacios donde no le compete, por ser el hermano se intenta meter en donde no debe estar.
Marvin Flores, de AC, explica que el problema básicamente es el mismo que el de el Gobierno anterior y las estructuras de corrupción del Estado, porque normalmente son clanes familiares los cuales se repiten en todo el Estado, en donde se observan hermanos, padres e hijos, trabajando y sustrayendo recursos públicos de manera ilícita.
Esta es una una característica de Guatemala y otras sociedad de tercer mundo, el peso que tiene la familia, que no se da en ciudades más desarrolladas. Guatemala es un país cuya concepción de institución familiar es muy fuerte y tradicional, la percepción de las personas de lo que significa la familia es mucho más cercana, no se puede negar que son temas de conversación, que son apoyo que se arma en torno a su familia, cita Víctor Gálvez Borrel, director de Incidencia Pública de la Universidad Rafael Landívar (URL).
Descrédito e ingobernabilidad
En estos diez meses de la nueva administración de Gobierno se han provocado situaciones que han afectado su imagen, credibilidad e incluso puesto cuesta arriba la gobernabilidad.
Recientemente la Fiscalía de Lavado de Dinero del MP llevó a cabo allanamientos en Casa Presidencial y en el Cuartel Militar Matamoros, no se ha dado mayor información, debido a que el caso se encuentra bajo reserva. El operativo, sin embargo, fue calificado de exitoso por el MP.
El Gobierno también tuvo que enfrentar los señalamientos contra la Secretaría de Asuntos Administrativos y Seguridad Presidencial (SAAS), de contar con una red de espionaje ilegal en contra de funcionarios, empresarios e incluso periodistas.
Pero los hechos que han causado desgaste a esta administración no terminan ahí. También salió a luz que los principales asesores del mandatario son cuatro exmilitares de línea dura.
En este sentido, analistas y expertos comentan que las prácticas de vieja política se han vuelto palpables en el Ejecutivo, y la última muestra de ello fue la negociación que hizo el mandatario Jimmy Morales para elegir al presidente y la nueva Junta Directiva del Congreso, y que es una clara interferencia de poderes.
Se han desgastado innecesariamente, este tema de elección del Congreso va a poner al Ejecutivo contra las cuerdas, porque la válvula de escape era el Legislativo y ahora esto se va a estancar. Veo un pésimo manejo político a corto y mediano plazo, y quienes son el circulo político de Jimmy, lejos de ayudarlo lo están terminando de hundir, ojalá que no caigamos en ingobernabilidad, porque nos hemos salvado de caer en crisis económicas por la falta de políticas, subraya Marvin Flores.
Roxana Ávila asegura que el mandatario no ha hecho las mejores elecciones de personal y asesores, se ha dejado manipular por algunas personas y recalca que no ha tenido la capacidad de discernir entre asesores buenos y malos.
Lo que se ha visto es que hay incapacidad para gobernar, comenta Jorge Wong, quien a la vez indica que hay muchos fallos, y la ciudadanía se ha dado cuenta de que esta administración no puede gobernar y la vieja estructura está tomando el control para seguir como siempre.