PARA LA CIUDAD CAPITAL: Dos décadas… ¡PERDIDAS!

  • Una ciudad moderna, eficiente y empoderada con los vecinos debe tener algunas cualidades específicas, de acuerdo con urbanistas y expertos en el tema: movilidad, modernidad, amigable con el medio ambiente, orden y planificación.  Con estas características, los vecinos pueden sentirse satisfechos.  ¿Qué pasa entonces con la ciudad de Guatemala, la más importante y grande de Centroamérica?

Análisis de Crónica

Con cerca de tres millones de habitantes, la ciudad de Guatemala es la metrópolis más grande e importante de Centroamérica, con casi el doble de población que Tegucigalpa y sus alrededores. Sin embargo, está lejos de alcanzar una buena calificación cuando se habla de los aspectos más importantes para que cualquier ciudad de gran tamaño funcione como merecen los vecinos.

Ahora que la mayor parte de la atención de la población se centra en el proceso para llegar a las elecciones generales del 25 de junio, poco se dice de la elección de la corporación municipal, y muchos consideran segura la reelección del alcalde Ricardo Quiñónez, un funcionario edil que ha permanecido en la Municipalidad durante las últimas dos décadas, por cierto, un tiempo que los expertos urbanistas consideran las décadas perdidas.

En estos 20 años se ha visto que las autoridades municipales hacen muchas cosas de ornato y promueven el crecimiento de edificios, lo que hace parecer la ciudad como desarrollada y moderna, mientras detrás de eso se esconde la realidad, que no es otra que la de tener postergados por dos décadas, los problemas de fondo.

Es una ciudad bien maquillada, dice un experto urbanista graduado de la universidad de Columbia, Estados Unidos. Sin embargo, él enumera los problemas que la comuna capitalina ha intentado mantener debajo de la alfombra, sin que los vecinos se percaten de la dimensión de cada uno.

Esta es la lista que nos da el experto: 1.- Deficiente sistema de transporte público; 2.- caos vehicular (los factores 1 y 2 se traducen en falta de movilidad); 3.- Mal tratamiento de la basura; 4.- Ausencia de tratamiento de aguas negras; y 5.- Falta de control en el manejo de extracción de agua del subsuelo y ningún proyecto ambicioso para el mantenimiento y recuperación de los acuíferos.

La movilidad

1.- TRANSPORTE PÚBLICO: La administración municipal de Fritz García Gallont fue la que diseñó el proyecto del Transmetro, un sistema de transporte colectivo que sin embargo no se principió a desarrollar sino hasta el año 2007.  El concepto, copiado de algunas ciudades de Colombia, es considerado limitado, aunque puede alcanzar algún grado de eficiencia si su planificación y desarrollo son los adecuados para el número de pasajeros que pueden movilizar. 

El Transmetro tiene una serie de deficiencias: Pocas líneas (7); número insuficiente de vehículos (400); pobre sistema de alimentadores; no llega a ninguna de las llamadas ciudades dormitorio, por lo que no evita el alto flujo vehículos que ingresa de Villa Nueva y Mixco, principalmente.

El Transmetro ha demostrado que es un servicio funcional, pero no resuelve el problema de fondo por la creciente necesidad de transporte colectivo. Un sistema con mayor capacidad es indispensable para asegurar movilidad.

Lo que los expertos recomiendan es la introducción de un sistema de metro, pero advierten que su desarrollo toma hasta 6 años para empezar a tener un efecto significativo en la movilidad de las personas.  Ciudades más pequeñas de Guatemala en América Latina cuentan con sistema de metro, entre ellas, Panamá, Quito, Santo Domingo, Maracaibo, Valencia, y San Juan (Puerto Rico), entre otras.

Este tipo de proyectos se pueden financiar por medio de organismos internacionales.  El alcalde Quiñónez, tras ganar la reelección en 2019, anunció que se pondría en función una vía de tren de pasajeros, pero cuatro años después, la promesa quedó sin cumplimiento.

2- CAOS VEHICULAR: Al no atender adecuadamente el servicio de transporte público masivo, la población se ve obligada a trasladarse diariamente en vehículos motorizados.  El parque vehicular aumenta y con él, los famosos atascos, que mantienen a los capitalinos y habitantes de la región metropolitana, condenados a perder diariamente entre 3 y 4 horas de su tiempo hábil.

Ya no se trata solamente planificar el tiempo, sino más bien es un desperdicio de horas/personas, lo que representa una pobre calidad de vida, además de la exagerada contaminación que provocan los cientos de miles de automóviles semiparalizados, pero generando CO2, que alimenta el efecto invernadero y cambio climático.

La ciudad de Guatemala es una de las metrópolis con peor tráfico del hemisferio. Hay horas que que un recorridos de dos o tres kilómetros puede tomar una hora. Los atascos bajan la calidad de vida de las personas y familias.

La solución de la Municipalidad se ha mantenido durante estas dos décadas en plantear como solución: a) construcción de pasos a desnivel, que solamente son efectivos cuando no se trata de las horas pico y; b) pedir a los conductores cada año que salgan con 15 minutos de antelación. 

Si se mejora el transporte colectivo –es imperativo– y se facilitan políticas como uso de rutas o carriles exclusivos para motos y bicicletas, no se verá una mejora en este sentido.  Sin movilidad adecuada, la ciudad nunca será amigable.

Basurero y tratamiento de aguas

3.- TRATAMIENTO DE LA BASURA: Otro de los problemas postergados siempre en su solución de fondo.  En agosto de 2016, las autoridades del ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), ordenaron el cierre del llamado relleno sanitario de la zona 3.  Las causas para tal orden fueron que genera contaminación atmosférica, hídrica, de suelo y visual. También se detectaron patios con grietas, temblores al momento de remover desechos y riesgo para los mil 500 recolectores que trabajan en ese sitio. 

Ciudades de países menos avanzado han encontrado en el tratamiento de la basura un medio para generar electricidad para la comunidad completa. En Guatemala se explota solamente por medio de los gases que genera la basura, mientras el basurero de la zona 3 continúa siendo un foco de contaminación.

En vez de llevar a cabo un proyecto integral para generar energía por medio de los gases que genera la basura descompuesta, se han dado concesiones a tercer, sin dar a conocer a la población la forma en que se han dado estos negocios.

Hay casos de empresas de electricidad de la propia ciudad aprovechando la basura para la generación.  Es importante dar a conocer también como se está protegiendo el manto friático, ya que hasta 2019 no había medidas de protección adecuadas.

4.- AGUAS RESIDUALES: Aunque la Municipalidad (Empagua) tiene en operación 6 plantas de tratamiento de aguas residuales –­algunas de ellas verdaderamente artesanales–, la ciudad capital sigue siendo el mayor contaminante de río Las Vacas, un afluente que lleva todos los desechos sólidos que recibe al río Motagua que, a su vez, desemboca en la playa de Omoa, en territorio de Honduras, país que se queja constantemente por los desechos que contaminan el océano Atlántico,

Un reciente reportaje publicado por la agencia Reuters a nivel mundial, muestra el grado de contaminación que llega de Las Vacas al Motagua.

De alguna se ha logrado imponer a las nuevas construcciones la inclusión de plantas de tratamiento de las aguas que generan, algo que tardó mucho en suceder.

El río Las Vacas es una muestra de la contaminación que llega luego al Motagua, proveniente, en su mayoría, de la ciudad capital.

Peligro de quedarnos sin agua y conclusiones

5.- ¿ESCACEZ DE AGUA EN MEDIANO PLAZO?: El peligro de quedarnos sin agua en el corto y mediano plazo se hace cada vez más latente.  La falta de una Ley de Aguas ha permitido una explotación sin control de los acuíferos, agravando la situación la alteración del ciclo de lluvias, que permitía, al menos, una recuperación natural de los mismos.

Según los expertos, hay crecimiento exagerado de la ciudad, lo que ha influido también en una brutal explosión del consumo, proveniente en gran parte de la construcción de proyectos habitacionales o comerciales, que hacen uso directo del agua por medio de pozos propios, que funcionan sin control de las autoridades municipales.

Tampoco hay una campaña para hacer uso razonable del líquido vital, lo que hace que el consumo y desperdicio esté totalmente fuera de control.

Los expertos advierten también que está desapareciendo muchas zonas verdes, que permiten la recuperación de agua, y ahora se ven cubiertos por asfalto y construcciones de vivienda o edificios.

En Guatemala, cualquiera que disponga de los recursos económicos suficientes, puede operar su propio pozo de agua, algo que ya sucede en residencias, edificios y grandes centros comerciales.  Se insiste en que en esto hay una falla del Estado, al no propiciar una Ley de Aguas que limite el uso del consumo de agua.

También existe una falta de estudios y datos en general sobre la producción y consumo de agua por medio de este sistema de bombeo.  Eso simplemente significa que no sabemos cuanta agua se extrae del subsuelo, ni cuánta agua queda.  Entonces, ante la falta de previsión, es posible que el drama pueda surgir en cualquier momento en los próximos años.

CONCLUSIONES: Las autoridades municipales, de manera similar a lo que sucede a nivel gubernamental, hacen obras cosméticas y efectivas en el orden cultural y otros, pero no atienden con la celeridad e importancia que requieren los graves problemas mencionados.

Cualquier visitante que llega a la ciudad comenta muy rápido que encuentra una ciudad paralizada por el tránsito.  La falta de movilidad tiene efectos de diferente tipo: ambiental, económico, de estrés y otros.  No se puede hablar de ciudad eficiente, si para trasladarse de un lugar a otro (cercano), tiene que perderse media hora o más, dependiendo de la distancia.

Lo mismo se puede hablar de los otros graves problemas mencionados. Todos tratan de maquillarsde de tal manera que sea suficiente para ganar una reelección.  La historia se ha repetido por dos décadas. ¿Seguirá así cuatro años más?