Panamá niega salvoconducto al expresidente Martinelli, quien busca el alero de Daniel Ortega

  • La cancillería panameña advirtió a Nicaragua de consecuencias si el expresidente Ricardo Martinelli emite comentarios que “repercuten en la política doméstica” del país.

Voz de América

El gobierno de Panamá rechazó este viernes una solicitud de salvoconducto para la salida del territorio al expresidente de ese país, Ricardo Martinelli, quien pretendía exiliarse en Nicaragua, luego de haber solicitado asilo político.

Martinelli, quien se encuentra en la embajada de Nicaragua en Panamá alegando razones políticas y una supuesta persecución en su contra, buscaba viajar a Managua, según una nota de prensa del Ministerio de Relaciones Exteriores.

“La solicitud de salvoconducto para la salida de la República de Panamá del señor Ricardo Martinelli, ha sido denegada en base a lo que dispone el Artículo 1 de la Convención sobre el Asilo de 1928 y de la Convención sobre Asilo Político de 1933”, reza el comunicado del gobierno de Panamá.

El comunicado de la cartera de Relaciones Exteriores de Panamá también hizo un recordatorio a la embajada de Nicaragua de “garantizar que la sede de la Misión Diplomática a su cargo preserve sus funciones que está llamada a cumplir”.

Roniel Ortiz, abogado del ex presidente de Panamá Ricardo Martinelli, habla con miembros de los medios de comunicación fuera de la embajada de Nicaragua en la ciudad de Panamá, el 7 de febrero de 2024.
Roniel Ortiz, abogado del ex presidente de Panamá Ricardo Martinelli, habla con miembros de los medios de comunicación fuera de la embajada de Nicaragua en la ciudad de Panamá, el 7 de febrero de 2024.

De igual forma subrayó que toda declaración que emita el expresidente Martinelli desde la sede diplomática nicaragüense y “repercuta en la política doméstica de Panamá, será considerada una injerencia en los asuntos internos” del país y, por tanto, generará “consecuencias diplomáticas”.

Su hijo le visita en la embajada

Horas antes de conocerse la decisión de la Cancillería, Martinelli recibió a su hijo Luis Enrique Martinelli Linares en la embajada de Nicaragua en la Ciudad e Panamá, donde se encuentra asilado desde hace dos días.

Colchones y aparatos eléctricos para darle comodidad al expresidente en la residencia de la embajada de Nicaragua en Panamá, en donde quedará algún tiempo en calidad de asilado.

Martinelli Linares llegó a visitar a su padre junto a Luis Eduardo Camacho, portavoz de la familia, quien afirmó que «si en Panamá se respetaran las garantías procesales, nadie tendría que salir del país».

«Lamentablemente, en Panamá no existe la justicia», concluyó el jurista.

El gobierno de Nicaragua otorgó el miércoles asilo a Martinelli, condenado a más de 128 meses de prisión, luego de que el mandatario se declaró «perseguido por razones políticas» y que su vida supuestamente se encontraba en riesgo.

Martinelli compareció un día después en CNN alegando que en Panamá “había una dictadura” y que era perseguido político por aspirar a la presidencia.

Protesta de la oposición nicaragüense

Martinelli es el tercer exmandatario centroamericano que cuenta con la protección del Estado de Nicaragua.

Los dos primeros son los expresidentes salvadoreños Mauricio Funes y Salvador Sánchez Cerén, ambos nacionalizados nicaragüenses, pese a que la justicia de su país los ha requerido en múltiples ocasiones.

“La dictadura Ortega Murillo concedió asilo político al expresidente de Panamá Ricardo Martinelli, quien fue acusado bajo las reglas del debido proceso y condenado a más de 10 años de prisión por blanqueo de capitales, demostrando una vez más su decisión de transformar a Nicaragua en un refugio para ladrones, corruptos, asesinos y narcotraficantes”, señaló la agrupación opositora Monteverde en un comunicado.

La organización política dijo que «la corrupción y el blanqueo de capitales son graves delitos que están socavando la integridad, democracia, institucionalidad y el desarrollo económico de los pueblos centroamericanos».

«Es por ello que todos los centroamericanos debemos enfrentar y condenar estas prácticas con valentía”, argumentó el grupo opositor.