El líder opositor Juan Guaidó regresó este martes a Venezuela procedente de Portugal, tras una gira internacional de 23 días para revitalizar la presión contra el presidente socialista Nicolás Maduro, constató la AFP.
Guaidó salió del aeropuerto internacional de Maiquetía, que sirve a Caracas, en medio de un cruce de golpes e insultos entre partidarios de Maduro y opositores, incluidos varios diputados. El dirigente abordó una camioneta rumbo a la capital venezolana, a unos 45 minutos por carretera.
«Ya estamos en Caracas. Traigo el compromiso del mundo libre, dispuesto a ayudarnos a recuperar la Democracia y la Libertad. Empieza un nuevo momento que no admitirá retrocesos y que nos necesita a todos haciendo lo que nos toca hacer. Llegó el momento», escribió Guaidó en Twitter al aterrizar.
«Hoy más que nunca serán necesarias la unidad, la confianza y la disciplina política. Atentos a los nuevos anuncios», agregó el jefe del Parlamento, reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países encabezados por Estados Unidos.
En un vuelo comercial de la aerolínea TAP, proveniente de Lisboa, Guaidó retornó después de violar por segunda vez una prohibición de salida del país.
El líder opositor no resultó agredido en las escaramuzas, según fuentes de su entorno.
Guaidó enfrenta varias causas judiciales en Venezuela. Washington, su principal aliado, ha advertido al gobierno de Maduro que cualquier acción contra él tendrá consecuencias.
«¡Guaidó, fascista!», gritaron trabajadores de la aerolínea estatal venezolana Conviasa, sancionada el viernes pasado por Estados Unidos, tras irrumpir en el área en la que diputados y periodistas esperaban por el jefe legislativo. Aguardaban por él, igualmente, miembros del cuerpo diplomático.
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) denunció agresiones contra reporteros.
La gira de Guaidó comenzó el pasado 19 de enero. Visitó Colombia, varios países de Europa, Canadá y Estados Unidos, donde fue recibido por el presidente Donald Trump, quien le prometió «aplastar» la «tiranía» de Maduro.