El exfutbolista y comentarista de radio y televisión Michael Robinson, murió a los 61 años, tras una larga lucha contra el cáncer.
«Con tremenda tristeza os comunicamos el fallecimiento de Michael. Nos deja un gran vacío, pero también innumerables recuerdos, llenos del mismo amor que le habéis demostrado», se informó este martes desde su cuenta oficial de twitter.
«Os estaremos eternamente agradecidos por haber hecho a este hombre TAN FELIZ, nunca caminó solo. Gracias», concluyó el mensaje, en referencia al himno que acompaña al Liverpool, equipo en el que vivió su mejor época como futbolista.
Nacido en Leicester, Robinson empezó su carrera futbolística en 1975 en el Preston North End, antes de pasar por Manchester City y después Brighton y acabar en el Liverpool en 1983, donde jugaría su temporada más exitosa (1983/1984).
Este delantero, alegre y bromista, ganó con los reds una Liga, una Copa de la Liga y una Copa de Europa en la final continental en la que el Liverpool se impuso en la tanda de penales a la Roma en la capital italiana (4-2, tras acabar el partido 1-1).
«Siempre celebré no tener que lanzar un penalti aquel día. Yo iba a tirar el sexto», había comentado en una ocasión.
Y de Gran Bretaña a España
De Liverpool, Robinson, perseguido por lesiones de rodilla, se fue al Queens Park Rangers (1984-1986), de donde marcharía al Osasuna de Pamplona español en 1987, equipo en el que colgaría las botas dos años después.
«Al principio no sabía ni dónde estaba, creí que la ciudad se llamaba Osasuna. Al ver al equipo penúltimo le dije a mi mujer que yo no podía salvarlo, que deberían haber fichado a Spiderman o David Copperfield», recordaba con su típico humor el exfutbolista.
Internacional con Irlanda en 24 ocasiones, con la que marcó 4 goles, Robinson, como él mismo confesó en varias ocasiones, se enamoró de España y comenzó en este país una fructífera carrera como comentarista para televisión, radio y prensa.
Su característico acento inglés y su peculiar sentido del humor se hicieron pronto populares en el panorama audiovisual español, donde trabajó en la televisión pública española, comentando, entre otros, el Mundial de 1990, así como en Canal+ o la cadena SER.
El propio Robinson había anunciado el 12 de diciembre de 2018 en una entrevista en un programa de la SER que le habían diagnosticado un «cáncer de los malos», un melanoma.
Cascada de condolencias
Su muerte ha desatado una catarata de mensajes de solidaridad empezando por el Osasuna, el equipo donde jugó en España, el Liverpool y medios en los que trabajó.
«Estamos consternados por el fallecimiento de Michael Robinson. Su legado siempre permanecerá entre nosotros. Enviamos nuestro más cálido abrazo a sus seres queridos», escribió el equipo pamplonica en las redes sociales.
«Estamos profundamente entristecidos por la muerte del exjugador Michael Robinson, de 61 años. Todos los que formamos el Liverpool estamos con su familia y amigos en estos tristes momentos. Descansa en paz, Michael», afirmó el Liverpool en su cuenta oficial de twitter.
«Desde La Liga queremos trasladar nuestras más sinceras condolencias a la familia y amigos de Michael Robinson, ex jugador de fútbol y comunicador deportivo», dijo el campeonato español en un comunicado, asegurando que «Michael deja un gran vacío, tanto personal como profesional».
También la plataforma de televisión Movistar +, se unió a las condolencias afirmando que «decimos adiós a la persona que nos mostró el camino hacia una forma diferente de retransmitir el fútbol y nos enseñó a mirar el lado humano del deporte».
Junto a ellos, futbolistas, periodistas y distintas entidades del deporte y la comunicación han enviado sus mensajes de pésame por la muerte de Robinson.