Mick Schumacher ha sacado una conclusión esperanzadora tras completar hoy una productiva última sesión de pruebas en Baréin, a dos semanas del inicio de la temporada en el mismo circuito donde se ha estrenado con el equipo Haas.
«Fue muy divertido. Me siento bien, me siento preparado», dijo el domingo el hijo de 21 años del siete veces campeón mundial de Fórmula 1, Michael Schumacher.
Mick Schumacher pudo completar 77 vueltas en el último de los tres días de pruebas en el circuito de Sakhir, mientras tomaba contacto con su bólido Haas.
«Todas las vueltas que logramos dar, especialmente en los dos últimos días, fueron muy positivas», subrayó el piloto alemán. «Hemos podido reunir muchos datos, tanto en condiciones de calor como de frío», añadió.
Mick Schumacher agregó que también había tenido que adaptarse a los coches de Fórmula 1, ya que son más susceptibles a la fuerza del viento que los de Fórmula 2, categoría en la que se coronó campeón del mundo la temporada pasada.
Dentro de dos semanas, el joven piloto disputará su primera carrera de Fórmula 1 también en el trazado de Baréin, el mismo donde su padre formalizó su regreso a la Fórmula 1 en 2010 antes de terminar definitivamente su carrera a finales de 2012.