VELOCIDAD marca el Fútbol
La tecnología permite ahora medir la velocidad y distancia que los jugadores de fútbol despliegan en la cancha. Hay quienes levantan la voz y advierten que existen jugadores que podrían desafiar, incluso, a Usain Bolt, reconocido como el hombre más rápido del mundo.
Carlos María Salvado
Madrid – El galés Gareth Bale llegó al Real Madrid con la aureola de ser el jugador más rápido del mundo con el balón en el pie. En la temporada anterior anotó un gol tras hacer una carrera de 58 metros en ocho segundos (27 km/hora). Hoy en día se sabe que un jugador aplicado de fútbol recorre entre 11 y 14 kilómetros en un partido. Se necesita un estado físico de primera para alcanzar ese nivel.
Posiblemente, mercadear su imagen internacional, tanto la liga BBVA (España), como la Premier League (Inglaterra), recurren una y otra vez a poner en el debate la velocidad de alguno de sus jugadores, al extremo de compararlos con el hombre más veloz del planeta, el jamaiquino Usain Bolt, quien suele responder de manera irónica: ya quisiera verlos en una pista de competencia.
Uno de los cambios más significativos que ha tenido el fútbol en las últimas dos décadas, es la preparación física de los jugadores y, particularmente, sus grandes estrellas, por las que se llegan a pagar cifras que antes eran realmente impensables y a cambio, se espera un rendimiento físico al más alto nivel.
Para una contratación moderna, los técnicos analizan videos, estadísticas, informes técnicos y psicológicos de cada uno de los jugadores, pero sobre todo, se centran en el potencial físico y rendimiento, que ahora se puede medir minuto a minuto durante un partido.
¿A qué velocidad corren?
Hay muchos debates sobre el tapete en este momento, pero dejemos que sea la tecnología la que nos de respuestas con ejemplos: un futbolista puede llegar a realizar hasta 100 metros esprint durante los 90 minutos de juego, aunque todos de diversa intensidad y tiempo. En este esfuerzo de máximo nivel, la media que se recorre es 1.8 kilómetros. Esto supone unos cuatro minutos en la mayor intensidad para el atleta. El resto del partido la pasa trotando, caminando o corriendo a mediana intensidad, hasta alcanzar la media de 11 kilómetros. No se mencionó antes, pero en las carreras cortas o sprint, alcanzan una velocidad promedio de 25 kilómetros por hora.
En resumen, los promedios de los recorridos de los jugadores en un juego de fútbol, se divide de la siguiente manera: un tres por ciento corre por la posesión del balón, 7 por ciento esprintean al máximo nivel, 18 por ciento corren o trotan, y el restante 72 por ciento, caminan. Aun así, el esfuerzo que realizan es muy grande, porque los 90 minutos transcurren entre cambios de ritmo y velocidad, a lo que hay que sumar el contacto físico y concentración mental.
Si analizamos las estadísticas por puestos, veremos que los porteros se desplazan poco, pero deben contar con reflejos superiores al promedio. Los defensas y delanteros son quienes más carreras cortas intensas deben realizar, mientras que los mediocampistas tienen un despliegue mayor. Sin embargo, hay que reconocer que en el fútbol moderno esto varía según la estrategia y estilo del técnico, porque hoy en día los defensas se convierten en atacantes —Marcelo (Real Madrid) es el mejor ejemplo—, mientras que se exige a los delanteros que también defiendan y hagan trabajo que se llama de sacrificio.
Para comprobar la evolución que ha sufrido el fútbol, es suficiente ver la estadística que publicó la revista Factor Running sobre uno de los jugadores que disputa el reconocimiento de mejor jugador de la historia: el brasileño Pelé.
Según la publicación, en el año 58, en plena explosión física y juventud, O’Rey recorría cuatro kilómetros por partido, y hacia el año 78 mejoró esa marca a seis kilómetros, la mitad de lo que un jugador de su nivel recorre hoy en día. Messi, que no es uno de los que más corre durante los partidos, recorrió un promedio de 8.5 kilómetros por partido en el mundial Brasil 14.
¿Ballerin o Bolt?
Nadie gana a la Premier League en cuanto crear, de tanto en tanto, un debate sobre la velocidad de los jugadores y compararlos nada menos que con el hombre más veloz del planeta, el jamaiquino Usain Bolt. Sin embargo, hay que partir de la realidad, y no es otra que no hay aún un futbolista que pueda bajar de los 10 segundos en los 100 metros planos.
La prensa inglesa publicó que el defensa del Arsenal, Héctor Ballerin, corrió en un entrenamiento 40 metros en 4.41 segundos, y Bolt lo hace en 6.64 segundos. Entonces, soltaron al vuelo las campanas del triunfalismo del fútbol sobre el atletismo en materia de velocidad.
Pero los expertos y el propio Ballerin pusieron pronto un alto a la discusión. No hay comparación entre uno y otro, por más que haya tenido una marca parecida en una prueba. El mismo jugador respondió a la prensa: Nada tengo que hacer. Él (Bolt) es un esprinter, es el hombre más rápido del mundo.
También se recogió la opinión de un excorredor de velocidad británico, Craig Pickering, quien dijo que había diferencias muy grandes entre las comparaciones. Los futbolistas medían su tiempo al pasar frente a puertas con sensores, mientras que los corredores tienen que responder a un tiro de salida.
Además, recordó que la velocidad promedio que alcanzan los futbolistas no permitiría a ninguno llegar a los 100 metros por debajo de los 10 segundos. Cuando Usain rompió el récord del mundo, alcanzó una velocidad de 44.7 kilómetros por hora y jamás he sabido de un jugador que supere los 36 kilómetros por hora de cualquier manera posible, concluye el exatleta británico.
Los más rápidos
Hay diversas organizaciones que publican “los diez mejores” con los jugadores más veloces, y puede haber diferencias entre las listas. Pero veamos el listado con los nombres más comunes entre los velocistas para la temporada anterior, es decir, la 2014-2015, porque la actual está en desarrollo y falta recabar todas las estadísticas para tener promedios fiables.
En todo caso, un equipo que este año apela menos al contragolpe y la velocidad, el Real Madrid, cuenta con dos de los jugadores más rápidos del mundo. La lista la encabeza el galés Gareth Bale (26 años) y el portugués Cristiano Ronaldo (31 años).
El método de medir
El sistema que se utiliza para medir el recorrido y la velocidad de los futbolistas, parte de tecnología militar sueca, aplicada a modernos sistemas de cámaras de televisión inteligentes. Eso ha permitido que la UEFA pueda presentar estadísticas precisas de los jugadores más veloces y los que más recorrido tienen durante las competiciones.
Una de las empresas que tiene esta tecnología es la italiana Deltatre. Se deben instalar un total de 16 cámaras en la zona alta de los estadios, y se alimentan con un sistema que permite asignar coordenadas a cada uno de los objetos que serán sujetos a medición. En este caso, son 22 jugadores, un balón, y tres árbitros. Las cámaras se reparten la totalidad del terreno a cubrir. Por supuesto que, todo se hace con un moderno software que cuenta con los datos de cada uno de los futbolistas. Este es el que hace los cálculos.
En Europa hay varias empresas que prestan este servicio a ligas y clubes, estos últimos, cada vez más interesados en hacer mediciones también durante los entrenamientos, con el fin de poder analizar el desempeño de cada una de sus estrellas previo a los partidos oficiales.
En España, clubes como el Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid y Valencia cuentan con estos servicios, y lo mismo está ocurriendo en Inglaterra, en donde los más importantes clubes de la Premier han contratado el servicio.
En Estados Unidos el basquetbol de la NBA cuenta con este tipo de mediciones, mientras que en la MLS se está haciendo de manera cada vez más regular. Se espera que su uso pueda masificarse pronto, sobre todo, porque el costo de la tecnología está disminuyendo y cada vez hay más acceso a este tipo de sistemas.
Bolt y el fútbol
En esta era de las contrataciones multimillonarias —el fichaje de algunos jugadores ha rondado los €100 millones—, la velocidad de los jugadores es una de las cualidades que más influyen, porque indudablemente mejora su potencial en la defensa o ataque. La velocidad no lo es todo, pero es muy importante para ir adelante o recuperar balones, en opinión de José Mourinho, quien considera que en el fútbol inglés es en donde más atención se pone a este factor.
Bajo esta visión, es muy cierto que, Jamaica tiene al hombre más rápido del mundo, Usain Bolt, pero es posible que el mundo se haya privado de un gran jugador de fútbol, porque como él mismo ha narrado, en un momento de su juventud pensó dedicarse al balompié en vez de las carreras de pista.
En Agosto del año pasado, en una visita a Inglaterra, el jamaiquino dijo, medio en broma y medio en serio, que podría contemplar fichar para el Manchester United, club al que visitó e incluso recibió una camiseta de los Diablos Rojos con el número 963, en alusión a su marca mundial.
La verdad es que nunca ha descartado incursionar en este deporte después de su retiro de las pistas, previsto para 2017.
Antes, la técnica era el factor de contratación de un jugador. Hoy es técnica y velocidad. Con las dos, el éxito está asegurado.
Gareth Bale es considerado el jugador más rápido en la actualidad, aunque hay debate siempre en torno a esto.
La generación de Pelé corría y recorría menos terreno en cada partido de lo que hacen los actuales futbolistas.
El entrenamiento de los futbolistas pone especial atención a desarrollar velocidad y potencia al correr.