Cada vez hay más controles en el deporte, pero no faltan los escándalos gigantescos a causa del dopaje. Ninguna disciplina está libre de este mal, el cual se intenta combatir con fuertes sanciones, que muchas veces alcanzan a los más destacados atletas.
Nombres de atletas tan famosos como Lance Armstrong, María Sharapova y Mark McGwire han brillado en sus deportes, pero también han sido objeto de grandes escándalos por consumo de sustancias prohibidas. El mundo del deporte está ahora bajo la permanente lupa del dopaje.
Las pruebas antidopaje se han vuelto comunes en todos los campeonatos locales e internacionales, a pesar de lo cual el mundo se sigue sorprendiendo por el consumo de estas sustancias, las cuales muchas veces alejan a los atletas de pruebas como los pasados Juegos Olímpicos Río 2016, a donde no pudieron acudir los mejores exponentes del atletismo ruso.
El código de la Agencia Mundial Antidopaje comprobó el uso de sustancias prohibidas en estos atletas, lo que hizo que su metabolismo cambiara y adquiriera una mejor forma competitiva, pero de manera ilegal. La sanción no se hizo esperar.
La intrahistoria
En noviembre del 2015, una comisión independiente de la Agencia Mundial Antidopaje liderada por Dick Pound —canadiense líder de la lucha antidopaje— presentó un informe en el cual señalaba que eran verdaderas las acusaciones formuladas en una documental alemana, que mostraba las irregularidades cometidas por autoridades y atletas rusos, todo un sistema de dopaje para promover el éxito de sus atletas en competencias internacionales.
Además, el informe señalaba con claridad a funcionarios de la Federación Rusa de Atletismo y del laboratorio antidopaje de Moscú, por aceptar dinero para suministrar sustancias prohibidas a los atletas y encubrir los resultados.
Pero las sorpresas no quedaban en ese punto. Se señalaba también que el Estado ruso era cómplice de aquella trama de corrupción, al extremo de utilizar a los servicios de inteligencia rusos para destruir pruebas. Este escándalo provocó que se recomendara la suspensión de por vida para cinco atletas y cinco entrenadores rusos, lo mismo que una suspensión temporal para varios más.
Tras las acusaciones, el Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAS) decidió vetar a los deportistas rusos de la participación en Río 2016, lo cual afectó a toda la delegación rusa en las distintas disciplinas de atletismo. Hubo apelación, pero finalmente el fallo no sufrió modificaciones y la historia es la que todos conocemos.
La Federación Internacional de Asociaciones de Atletismo (IAAF) suspendió a su vez a la Federación de Atletismo de Rusia. El golpe al deporte en general era muy grande, pero el mensaje de buscar un juego limpio —libre de dopaje— estaba funcionando. El británico Sebastian Coe —doble campeón olímpico— presidente de la institución, mostró su desencanto al declarar que hoy no es un día triunfal, porque yo no me vinculé al deporte para prohibir que los atletas compitan, pero hay que hacerlo cuando es necesario.
Informó que la IAAF seguirá trabajando para ayudar a Rusia en el proceso de establecer un ambiente limpio y sano para sus atletas, para que su federación y equipo puedan ser reconocidos y regresar a la competencia internacional.
Este caso tuvo grandes repercusiones por descubrirse previo a los Juegos Olímpicos y por las implicaciones que alcanzó al suspender a casi la totalidad de la delegación de atletismo rusa, pero antes han existido varios casos de gran impacto entre las aficiones de los diferentes deportes.
Armstrong, el más sonado
El mundo entero se conmocionó en 2012, cuando después de un largo proceso de investigación le fueron retirados a Lance Armstrong la mayoría de títulos ganados durante su exitosa carrera como ciclista profesional, particularmente los que se adjudicó en el Tour de Francia, la competencia más famosa del mundo.
Ganador de siete Tours, era considerado como uno de los atletas más extraordinarios del siglo XX y de la historia. Su imagen rozaba con la imagen de una leyenda, sobre todo porque en 1996 se sometió al tratamiento de cáncer por tener esta enfermedad en uno de sus testículos. Volvió a subir a la bicicleta tras la batalla por su vida, y marcó la época dorada del ciclismo. Todo terminó en un espejismo creado por las sustancias prohibidas que usaba para ser el mejor ciclista de alto rendimiento.
Sus triunfos en Francia entre 1999 y 2005 despertaron la curiosidad de expertos e investigadores. Durante muchos años se especuló sobre el tema, pero parecía imposible confirmar un caso de dopaje.
Fue en un programa de Oprah Winfrey, en 2013, cuando Armstrong confesó al mundo lo que había hecho: Es imposible ganar siete Tours sin doparse —reconoció—, antes de explicar que todo fue una gran mentira que resultó bastante perfecta durante mucho tiempo. No sentía que estuviera haciendo trampas, doparme era parte de mi trabajo. Su imagen de ídolo se desmoronaba totalmente.
El texano dijo que había consumido todo tipo de sustancias prohibidas, diciendo que su cóctel principal era EPO, transfusiones de sangre y testosterona.
Ya para entonces había demasiadas dudas y denuncias en torno a su comportamiento. Excompañeros y otros ciclistas confesaban lo que ya era imposible seguír ocultando.
Para explicar por qué lo había hecho, Armstrong dijo que tenía una actitud de ganarlo todo y añadió en ese programa televisivo, el cual alcanzó récord de audiencia: La tomé primero ante el cáncer y la transporté al ciclismo. Y eso es malo, quise perpetuar la historia. Ganar era importante y aún me gusta, pero ahora veo el triunfo de otra manera. El deseo de ganar a toda costa, el nivel al que llegó es un problema. La arrogancia y ser desafiante me perdieron.
Lance Armstrong fue suspendido de toda actividad deportiva-profesional de por vida. La Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA) le retiró las siete victorias en el Tour de Francia. La decisión fue ratificada por la UCI el 22 de octubre del mismo año y además, anuló su palmarés ciclístico a partir de 1998.
Ingenua María Sharapova
Un caso más reciente es el de la tenista rusa-estadounidense, María Sharapova, quien dio positivo en el control antidopaje por el consumo de sustancias prohibidas. En este caso, la sustancia fue el Meldonium.
El Meldonium es utilizado en muchas ocasiones para engordar animales más rápidamente. También aumenta la resistencia y la habilidad de recuperación tras el esfuerzo físico, por lo que beneficia el rendimiento, protege contra el estrés y mejora la activación del sistema nervioso central.
A pesar de esto, fue la misma Sharapova quien quiso aclarar el tema, afirmando que durante 10 años, esta medicina no estuvo prohibida y la he tomado de manera legal, aunque luego, en diciembre del 2015, el Meldonium apareció en la lista actualizada de sustancias prohibidas y la tenista rusa dijo no saberlo, ya que la sustancia había sido inscrita en la lista con otro nombre: Mildronate.
A pesar de ser sancionada por 24 meses por el TAS inicialmente, la jugadora apeló la decisión y la Federación Internacional de Tenis (FIT) pidió al TAS desconocer el argumento por culpa no significativa de la tenista.
A pesar de la negatividad de la FIT, el TAS decidió reducir la sanción de 24 a 15 meses, los cuales se cumplen el 25 de abril del 2017.
Su caso parece ser más sencillo que el de otros atletas. Muchas veces las sanciones son de por vida, otras temporales y en algunos casos, abarcan a los entrenadores por considerar que son cómplices en el uso de drogas estimulantes para los deportistas.
Otros casos famosos de dopaje
La historia del deporte se ha visto manchada desde finales del siglo XX al mejorar los controles antidopaje. Hoy en día, los atletas de alto rendimiento se ven sometidos a exámenes periódicos y de mucha precisión.
A continuación, algunos de los casos más sonados en diferentes deportes.
- Diego Armando Maradona
- ganador de un mundial y muchos títulos colectivos, el mejor jugador de fútbol de su época, dio positivo por efedrina. Sufrió también varias suspensiones por su adicción a las drogas.
- Alberto Contador
- Ciclista español, dio positivo por clembuterol. Ganó tres Tours de Francia y dos giros de Italia. Superó su sanción y actualmente es uno de los ciclistas más destacados del circuito profesional europeo.
- Marion Jones
- Tuvo que devolver las tres medallas de oro y dos de bronce ganadas en Sidney, tras reconocer que se había dopado.
- Andre Agassi
- Uno de los mejores tenistas de siempre, dio positivo por el consumo de metanfetaminas en 1997, no fue sancionado.
- Ben Johnson
- Corredor de 100 metros, perdió el récord mundial luego de dar positivo en estanozolol. Fue sancionado de por vida.
- Mark McGwire
- Impuso marcas de cuadrangulares en el beisbol de Grandes Ligas. Sin embargo se confirmó que utilizó esteroides para mejorar su rendimiento y fuerza. Ningún récord impuesto se le reconoce.