Bobby Rodríguez
Nueva York – No son grandes sorpresas las predicciones de las Grandes Ligas para 2016: Los Reales de Kansas quieren repetir, los Medias Rojas de Boston retornan como favoritos, y los Cachorros de Chicago, Gigantes de San Francisco, e Indios de Cleveland, darán mucho de que hablar por la calidad de pelota que jugarán. Eso sí, nunca hay que olvidar que pocas veces se cumplen todos los pronósticos en este deporte.
La MLB está de vuelta desde el tres de abril pasado, y luego de una pretemporada sin altibajos, todo indica que este año se verá en todo el país una de las competencias más apasionantes de los últimos años, con gran parte de la atención centrada en el dominio que los lanzadores puedan tener —o no— sobre los grandes bateadores.
Si se cumple aquello de que en el beisbol, los lanzadores son los más decisivos en los resultados, habría que poner toda la atención en la imponentes rotaciones que han logrado formar cinco clubes: Dodgers, Indios, Nacionales, Mets y Cachorros.
Los grandes ausentes, en casi todas las listas de favoritos para la temporada, son los Yankees de Nueva York. Aunque su manager, Joe Girardi, asegura que están para la Serie Mundial y no para jugar por el comodín, los expertos consideran que su esfuerzo por construir un roster más joven y sin contratar a estrellas deslumbrantes el pasado invierno, no hará más que mantenerlo en la mediocridad que han mostrado desde 2012. Esta pretemporada no les he visto gran cosa y no extraña la pobre marca registrada.
Mi pronóstico este año en la Liga Americana, apunta a que las divisiones serán ganadas por Medias Rojas, Reales y Rancheros de Texas. Los Indios y los Astros de Houston serán quienes luchen por el comodín. En la Nacional, los números apuntan a que Gigantes, Cachorros y Nacionales de Washington se hagan de los banderines divisionales, mientras la lucha por los comodines quedará entre Cardenales de San Luis y los Dodgers.
Esto sucederá si, por supuesto, los jugadores, los mánager y organizaciones en general, responden a las expectativas que arrojan las proyecciones que se hacen de manera matemática en la actualidad, siempre basadas en los números que se hayan obtenido en el pasado.
Rotaciones poderosas
Ha llamado la atención la forma en que se han integrado las rotaciones poderosas que antes mencionamos. Con las nuevas tecnologías, ahora se pueden tener datos proyectados sobre lo que se espera de cada uno de los jugadores de las Grandes Ligas para la temporada regular y, en ese sentido, se puede anticipar que los cinco clubes serán grandes protagonistas.
Esta lista de clubes con poderosas rotaciones de lanzadores la encabezan los Cachorros, quienes siguen luchando para terminar con la maldición de la cabra, que según la tradición, es la culpable de que en más de cien años el club no haya podido ganar una Serie Mundial. Hay que recordar que el año pasado Jake Arrieta, tuvo un cierre de temporada más que impresionante, con la mejor segunda mitad de temporada en la historia de las Grandes Ligas, lo que le valió incluso el premio Cy Young de la Liga Nacional. A él se suman Jon Lester, John Lackey —llegó contratado por US$32 millones por dos años—, Jason Hammel, y Kyle Hendricks. Si cada uno de ellos produce su potencial desde el montículo, podría ser que la maldición termine.
Los Mets, que no aparecen en ninguna lista de favoritos, pero cuentan con la más profunda de las rotaciones en las Grandes Ligas. Los números de sus dos primeros abridores, Matt Harvey —2.71 efectividad— y Jacob deGrom —2.54—, hablan por sí solos, y si se le suman los brazos del mejor prospecto que hay en la Nacional, Steven Matz —2.27— y los de Noah Syndergaard y Bartolo Colón, nos encontramos con un cuerpo de lanzadores que sería el sueño de cualquier mánager.
El problema de los Mets es que están en la misma división de los Nacionales, que tienen una rotación similar, aunque los números que proyectan son ligeramente mas solidos que los metropolitanos.
La estrella de Washington en el montículo será nuevamente Max Scherzer —2.79—, quien nos dejó para el recuerdo dos juegos sin hit ni carrera. Tras él estarán Stephen Strasburg, Gio González, Tanner Roark y Joe Ross.
Entre las mejores rotaciones solamente aparece un club de la Americana, los Indios, además, favoritos para su división. Ellos contarán con una rotación de fuertes ponchadores. La lista la encabeza Corey Kluber — 9.9 ponches por partido—, y tras él lanzarán Carlos Carrasco —10.6—, Danny Salazar —9.5—, Trevor Bauer —8.7— y Josh Tomlin, que no es ponchador. Pero cabe destacar que los tres primeros terminaron en la lista de los diez mejores promedios de efectividad también.
Por último, en este quinteto con lanzadores de lujo, encontramos a los Dodgers que, aunque perdieron al estelar Zack Greinke —contratado por los D-backs por la friolera de US$206 millones por seis años—, tienen una rotación impresionante, encabezada por el tres veces ganador del Cy Young, Clayton Kershaw, cuyos números son los que hacen que se les contemple para esta exclusiva lista. A él hay que sumar lo que pueden hacer Brett Anderson, Hyun-jin Ryu, Alex Wood y Mike Bolsinger. Mi opinión es que hace falta un refuerzo en esa lista, pero cualquier otro club quisiera tener esos nombres.
Los archienemigos
Hay pocas rivalidades en la MLB como la que mantienen históricamente los Yankees y los Medias Rojas. Nueva York y Boston suelen disputar la División Este de la Americana, aunque los actuales campeones sean los Azulejos de Toronto. Estos dos enemigos apuestan por sus figuras jóvenes y a tener alineaciones muy balanceadas.
Sin embargo, mientras a los Mulos de Manhattan no se les ve la fuerza suficiente para llegar a postemporada, a Boston se le mira nada menos que en la Serie Mundial, a pesar de haber terminado últimos la temporada anterior, con marca de 78-84.
El pronóstico se hace al repasar los números de los jóvenes de su alineación y el potencial que deben alcanzar este año, pero se suman las dos excelentes contrataciones que hicieron para el montículo: su estelar abridor será David Price, contratado por US$217 millones y siete años, el cerrador llega de los Padres de San Diego, Craig Kimbrel.
Además, el club no aceptó ningún cambio con sus jóvenes jugadores y ahora están listos para ser nuevamente contendientes serios para el Clásico de Otoño.
Los Yankees, en cambio, no han visto más allá de Gerardi, y tendrán que contentarse con otra temporada en la que luchan por llegar a la eliminatoria y, si lo logran, sufren demasiado por la falta de talento. Además, arrastran nombres que tienen más años que calidad, como Rodríguez, Teixeira y CC Sabathia.
La alegría ha vuelto a los estadios más grandes del país. De nuevo podremos ver si los pronósticos se han vuelto más acertados con tanta matemática y tecnología que se utiliza ahora para predecir lo que hará cada jugador, cada plantel. Recordemos que la pelota estará caliente todo el año.
Los Reales de Kansas están en la lista de candidatos para la Serie Mundial. Si llegan, sería su tercer año consecutivo y buscarían repetir la hazaña de la temporada anterior.
Hay quienes ven en Joe Girardi el mayor obstáculo para que los Yankees vuelvan a ser lo que una vez fueron: Los bombarderos del Bronx.