El Lago de Atitlán, considerado uno de los más bellos del mundo, podría sufrir daños irreversibles en siete años, si no se toman las medidas necesarias para evitar su contaminación.
Lo anterior fue informado por el Ministro de Ambiente, Sidney Samuels, quien el pasado viernes se reunió con los jefes ediles de Sololá para tratar asuntos relacionados a la conservación del lago, al indicar que la situación del manto acuífero empeorará en esos años, de no tomarse medidas efectivas.
Agregó que por la contaminación que recibe cada día se deben tomar las acciones necesarias para su rescate, de lo contrario podría sufrir las mismas consecuencias que el Lago de Amatitlán.
En ese contexto, el funcionario explicó que se espera que para mayo del 2019 ya estén funcionando todas las plantas de tratamiento de aguas residuales, destacando que la situación de contaminación es crítica.
El titular de la Cartera de Ambiente dijo que se buscan los recursos para los proyectos de limpieza, pero que eso no servirá de nada si las autoridades municipales no toman conciencia para reducir el nivel de contaminación.
Por su parte, el alcalde de Panajachel, Enio Urizar, solicitó a Samuels su intervención ante la Vicepresidencia de la República, para que se agilice un fondo de Q50 millones existente para la conservación del Lago de Atitlán.
La próxima reunión se llevará a cabo a principios de mayo próximo para definir una agenda de prioridades y proponer proyectos.