LA RED: De dónde telas…


(Expresión popular cuando se dice que no hay nada de lo que se habla, ya sea dinero, comida… o situaciones.  Se concluye con la frase “… si no hay arañas)

Crispino Picón Rojas


Antes, una pregunta con respuesta: ¿Por qué dicen que a los antidemocráticos se les cayó su castillo de naipes?

Ellos contaban conque Donald Trump los invitara a su juramentación, pero ¡nel! Ellos creyeron que Marco Rubio los escucharía, pero ¡nel!

… ¡Y dale con eso del fraude! Ha transcurrido más de año y medio, y el Ministerio Público (MP), con el fiscal Rafael Corrupchiche como altoparlante, no deja de insistir en que el 25 de junio del 2023 se dio un descarado fraude electoral –que nadie más que ellos vieron–, el cual, en todo caso, han sido incapaces de demostrar.  Claro, lo que pasa es que no hay arañas, y entonces andan viendo de dónde las sacan.

Por cierto, la Fiscalía Contra la Impunidad (FECI) se creó en 2008 y cuando el mal recordado Jimmy Morales le dio caravuelta a la CICIG por estar inmersa en una lucha anticorrupción que descubría cada jueves –más o menos, pero jueves de CICIG al fin y al cabo–, escandalosos casos de corrupción.  Esos casos en su momento indignaron a medio mundo, aunque hay que reconocer que pronto quedaron en el olvido y poco a poco los mañosos han ido saliendo de la cárcel.

Pero volviendo a la FECI, se ha convertido en una fábrica para buscar estructuras criminales, y así se meten hasta en temas que no les competen, como son los temas electorales, que deben ser atendidos y resueltos estrictamente por el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Pero alguien le susurró al oído a Corrupchiche que se aferrara a la ley del crimen organizado, y ahora la utiliza hasta para ir al baño.  En lo penal, le ha servido para perseguir a periodistas, fiscales y jueces.  Todo el que huela a anticorrupción, lo tildan de formar con sus amigos, colegas o conocidos, una estructura del crimen organizado.  Es entonces cuando entran sus compinches, jueces descarados que se sacan resoluciones de la manga, como la que hizo el tirador experto Fredy Orellana, cuando aceptó pruebas ilegales contra José Rubén Zamora, porque en España, qué es una democracia –dijo y lo repitió–, las acepta. Esa frase, que en realidad era para reírse a carcajadas, sirvió para iniciar el manchado e ilegal proceso contra el periodista.

Pero me estoy desviando.  El tema de fondo es que el oscuro fiscal de la FECI, al que muchos ven como alguien con muchas limitaciones, emprendió después de la primera vuelta electoral lo que él considera una cruzada para defender la democracia, esa misma a la que él quiere destruir con su alocada teoría, digna de una comedia de Los tres chiflados

Imaginen este escenario: En Venezuela, María Corina Machado presentó pruebas irrefutables del fraude de Nicolás Maduro menos de 48 horas después de las elecciones, mientras que el ágil, brillante y decidido Sherlock Holmesdel MP, lleva 18 meses tejiendo telarañas para ver si logra que le caiga algo… y ni moscas.

Como les sucede a Los tres chiflados, todo le sale mal. Desde un principio trazó sus líneas de investigación y se tiró contra el TSE y el Movimiento Semilla.  Este último, pensando que, si lograba demostrar que no debía ser partido para las elecciones, tal vez podría tener su inútil teoría algún asidero legal.  Después arremetió contra los magistrados del TSE y llegó al abuso de incautar papelería de las elecciones.  Pero como le diría cualquier patojo chispud: ¿De dónde telas… si no hay arañas?

Lo que sí hay que reconocer al mero mero de la FECI es que parece mago, porque se saca del sombrero o de la manga sus absurdas teorías de conspiración, con capacidad e ingenio para fumárselas y, aunque es incapaz de concluir algo con éxito, encanta a la fiscal general Consuelo Porras como a una serpiente.

Por cierto, nadie como el Dream team que ha logrado integrar la doña de Gerona. Prueba de ello, es que todos tienen la gloriosa medalla de ser considerados como corruptos y antidemocráticos por gran parte de la comunidad internacional.

Si, toda la macoya que trabaja en las tramas que arma el MP están en la Lista Engel, por lo que les quitaron la visa para los yunaites.  Ahora dicen que por eso no pudieron ir a las parrandas por la juramentación de Donald Trump, pero la verdad es que nadie se dignó a invitarlos y la única invitación que llegó al despacho de la fiscal, fue una por la que pagaron US$15.000. ¿Qué talito?

Como justo reconocimiento hay que mencionar al Dream team: la fiscal Porras, Corrupchiche, Orellana, Jimmi Bremer, Cinthia Monterroso, Ricardo Méndez Ruíz&Cía y otros que se me escapan, pero que son el equipo soñado para mantener la impunidad y perseguir a quienes no acepten sus ideas antidemocráticas y, además, tengan etiqueta de anticorrupción.

Por último, Marco Rubio le puso la guinda al pastel de los antidemocráticos, que siguen añorando que les devuelvan sus visas para ir a ver a Mikey. En la conferencia de prensa dijo que Bernardo Arévalo es un ejemplo por su lucha por la democracia» que, por supuesto, no es otra que la que viene librando aunque sea sin la energía necesaria– en contra del MP, que a puro tubo quiere ver arañas dónde no las hay.

Les dejo una cuántas preguntas sin respuesta:

¿Cuánto dinero ha tirado a la basura el MP, en su iluso intento por demostrar el inexistente fraude? ¿Hasta dónde piensan llegar Corrupchiche y sus compiches en la loca persecución contra el TSE? Y, finalmente: ¿Por qué no se arma de valor Bernardo Arévalo y pone fin al reinado maligno de Gerona?


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