La vicepresidenta de EEUU demandó a Israel que permita aliviar las condiciones «inhumanas» y de «catástrofe humanitaria» por las que atraviesa el pueblo palestino.
Voz de América
Reuters
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, pidió un alto el fuego inmediato en Gaza y presionó enérgicamente a Israel para que aumente el flujo de ayuda a fin de aliviar lo que calificó de condiciones «inhumanas» y de «catástrofe humanitaria» entre el pueblo palestino.
Los comentarios de Harris han sido de los más tajantes realizados hasta ahora por un alto cargo del Gobierno estadounidense pidiendo a Israel que alivie las condiciones en Gaza.
La vicepresidenta, que habló en un acto en Selma, Alabama, para conmemorar el aniversario del «Domingo Sangriento», cuando tropas estatales golpearon a manifestantes pacíficos, instó a Hamás a aceptar un acuerdo para liberar a los rehenes que pondría en marcha un alto el fuego de seis semanas y permitiría que fluyera más ayuda.
«La gente en Gaza se muere de hambre. Las condiciones son inhumanas y nuestra humanidad común nos obliga a actuar», afirmó Harris. «El Gobierno israelí debe hacer más para aumentar significativamente el flujo de ayuda. No hay excusas», agregó.
Reunión con funcionario israelí
La vicepresidenta Harris se reunirá este lunes con el miembro del gabinete de guerra israelí, Benny Gantz, en la Casa Blanca.
Un funcionario del gobierno de Joe Biden dijo que se espera que las conversaciones se centren en las víctimas civiles palestinas, en asegurar un alto el fuego temporal y la liberación de rehenes, así como en aumentar la ayuda al enclave.
«La vicepresidenta expresará su preocupación por la seguridad de hasta 1,5 millones de personas en Rafah», dijo el funcionario, añadiendo que Israel tiene «derecho a defenderse frente a las continuas amenazas terroristas de Hamás».
En un comunicado, Gantz confirmó que se reuniría con Harris, así como con el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y con miembros republicanos y demócratas del Congreso.
Israel boicoteó el domingo las conversaciones sobre el alto el fuego en Gaza celebradas en El Cairo después de que Hamás rechazó su exigencia de una lista completa con los nombres de los rehenes que siguen con vida, según un periódico israelí.
«Hamás afirma que quiere un alto el fuego. Pues bien, hay un acuerdo sobre la mesa. Y como hemos dicho, Hamás tiene que aceptar ese acuerdo», dijo Harris. «Consigamos un alto el fuego. Reunamos a los rehenes con sus familias. Y proporcionemos ayuda inmediata a la población de Gaza», afirmó.