Juicio contra exmilitares ¿HONOR O TERROR?

Sergio Del Águila

sdelaguila@cronica.com.gt

 

 

DSC_7264Mario Polanco

Grupo de Apoyo Mutuo

(GAM)

 

 

 

«Juicio genera certeza en impartición de justicia»

¿Es bueno o malo para Guatemala llevar a juicio casos de violaciones a los derechos humanos y capturar de ex militares de alto rango? Lo vemos como una medida positiva que fortalece la institucionalidad, genera  certeza en la impartición de justicia. Hace prevalecer el Estado de derecho y da  confianza en la sociedad, entre los familiares de las víctimas que durante décadas  buscaron justicia y se les denegaba, porque los tribunales anulaban cualquier caso.  La impunidad prevaleció y prevalece.

 

¿Cuál es su visión sobre las masacres que ocurrieron durante la guerra y  de las que poco sabe la juventud y el país? Fue una forma de terrorismo de Estado. Durante décadas, el Ejército y la Policía se  dedicaron a establecer el orden sobre la base de la ilegalidad y violación de los  derechos humanos. Las ejecuciones extrajudiciales masivas, que son masacres,  fueron el resultado de operativos contrainsurgentes sin precedentes en ninguna  parte  del mundo occidental.

 

¿Por qué se le da una visión ideológica al tema? ¿No debería ser  estrictamente judicial,  culpables o inocentes, pero con el debido proceso? Quienes le tratan de dar una visión ideológica son aquellas personas que promueven la impunidad y la corrupción. Las organizaciones de víctimas no lo vemos como izquierda y derecha, sino como verdad y justicia. Nos desvinculamos de cualquier  señalamiento de tener un sesgo ideológico. Tenemos procesos contra exmilitares y  contra exguerrilleros.

 

¿Está preparada la Justicia guatemalteca para llevar a cabo con total  independencia estos procesos? La Justicia todavía está en proceso de alcanzar su independencia,  pero cada vez el  país se beneficia con fiscales y jueces más independientes. Hay que destacar la  valentía de los que se atreven a iniciar procesos a los que aún guardan poder.

 

Se señala a la fiscal general de izquierdista, pero hace un mes fue  aplaudida por todos. ¿Es justo obviar el avance en el Ministerio Público?

Quienes hacen señalamientos contra la fiscal son aquellos que promueven la  impunidad y la corrupción. La fiscal actúa en ley y no se debe vincularla con  ninguna ideología. Nadie más alejado de tendencias que Thelma Aldana. Entiendo   el reclamo de los familiares de los capturados, pero a lo mejor ignoraron las  atrocidades que cometieron contra gente desarmada.

 

¿Qué piensa de las personas de derecha con visión social? Creo que la confrontación está en la mente de algunos pocos que siguen viendo a  Guatemala en el contexto de la Guerra Fría, no se atreven a ver hacia el futuro,  donde prevalezca el Estado de derecho. Lo importante es que tengan una visión  que contribuya a superar la marginación que tanto daño nos  ha hecho.

 

¿Ve a Ricardo Méndez Ruiz como un radical de derecha? Prefiero no opinar de él.  Puedo hablar por mí. No tuve ninguna militancia con grupos ideológicos en las tres  décadas que he trabajado en el GAM. Mi vida ha sido pública. Mi ideología se llama  Guatemala.

 

 

DSC_7420Ricardo Méndez Ruiz

Fundación contra el Terrorismo

La captura de 18 militares retirados, acusados de masacres y desapariciones forzadas durante una década del conflicto armado (1978-1988), abre un importante proceso judicial, pero también una nueva polémica ideológica en la sociedad guatemalteca. Para la derecha, los militares impidieron la caída de Guatemala en un sistema comunista. Para la izquierda, en cambio, fueron la imagen de un Estado represivo que violó los derechos humanos. Conocer visiones distintas del tema puede ayudar para que haya alguna luz y quizás, algún día, termine esta confrontación entre actitudes que recuerdan la Guerra Fría este-oeste.

 

«MP viola la Ley de Reconciliación»

¿Es bueno o malo para Guatemala llevar a juicio casos de violaciones a los derechos humanos y capturar de exmilitares de alto rango? Es pésimo, porque el Ministerio Público (MP) viola la Ley de Reconciliación de 1996, que otorgan una amplia amnistía para ambas partes. Es  inaceptable, porque es el ente encargado de la persecución penal,  el que atenta contra la Ley.

 

¿Cuál es su visión sobre las masacres que ocurrieron durante la guerra y de las que poco sabe la juventud y el país? No solo la juventud, sino que todos tienen saber que las masacres de las que se  habla contra los oficiales militares son farsas montadas por la Fundación de  Antropología Forense de Guatemala, una organización dirigida por Fredy Peccereli,  hijo de un guerrillero que ya externó opinión en contra del Ejército, lo cual lo  descalifica como perito.

 

¿Por qué se le da una visión ideológica al tema? ¿No debería ser  estrictamente judicial,  culpables o inocentes, pero con el debido proceso? Lo que hay  atrás del juicio es sencillamente un negocio. Se trata de un negocio sucio que se consigue a través del resarcimiento  obtenido en las sentencias que emite la Corte Interamericana de Derechos  Humanos, en contra de Guatemala.

 

¿Está preparada la Justicia guatemalteca para llevar a cabo con total  independencia estos procesos? Definitivamente que no. Hay actores que presionan al MP, uno de ellos es la CICIG,   que participó ilegalmente en las órdenes de captura contra los 18 oficiales  procesados. Es illegal, porque actuar en temas del enfrentamiento armado interno  se sale absolutamente del mandato y  los límites de esa organización.

 

Se señala a la fiscal general de izquierdista, pero hace un mes fue  aplaudida por todos. ¿Es justo obviar el avance en el Ministerio Público? La fiscal general atravesó el río, pasó la línea obligada por la CICIG, que ahora  la confronta con ese 85 por ciento de la población que aprueba y confía en el  Ejército. Entonces, el papel de ella cambió a los ojos de la población. Los 400  policías ocupados durante la detención de los 18 ancianos ex militares pudo haber evitado  una de las 16 muertes que a diario castigan a Guatemala.

 

¿Qué piensa de las personas de izquierda con visión social? El  problema es mercantil y le puedo mencionar un ejemplo claro, el  del señor Mario Polanco, quien está sindicado de estafa por el Programa Nacional  de Resarcimiento, por  haber falsificado documentos de supuestas víctimas del  enfrentamiento armado interno,  qué solvencia moral tiene un  estafador para tener capturados a los señores oficiales del Ejército.

 

¿Ve a Mario Polanco como un radical de izquierda? No es nada más que un mercachifle que ha pretendido ganar dinero  por la  desaparición del marido de su concubina, Nineth Montenegro. Eso consta   en una resolución de la Corte Interamericana relacionada con la desaparición de  Fernando García, según la cual solicitó una indemnización millonaria por el marido  de su mujer.

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