- Aunque se espera que el huracán Lee se debilite y no toque tierra, se prevén olas peligrosas para Puerto Rico y las islas cercanas.
Voz de América
SAN JUAN, PUERTO RICO — El viernes por la noche, el huracán Lee avanzaba a través de las cálidas aguas del Atlántico amenazando con desencadenar marejadas en el noreste del Caribe. Se convirtió en el primer huracán de categoría 5 de la temporada antes de empezar a debilitarse, según los pronósticos.
El viernes por la tarde el sistema meteorológico se había reducido a un huracán de categoría 3, y no se esperaba que tocase tierra. Sin embargo, los meteorólogos advirtieron que generaría olas peligrosas de hasta 5 metros a lo largo de la costa norte de Puerto Rico y otras islas cercanas. Lee seguía una trayectoria que lo llevaría a un par de cientos de kilómetros al noreste del Caribe y no se pronosticaban condiciones de tormenta tropical en la región.
«A pesar de que el huracán es increíblemente poderoso, su campo de viento no es particularmente grande», afirmó el Centro Nacional de Huracanes.
El viernes por la tarde, el huracán se encontraba aproximadamente a 705 kilómetros al este de las Islas de Sotavento del Norte. Tenía vientos máximos sostenidos de 185 kilómetros por hora y se desplazaba hacia el noroeste a 20 kph.
«Las fluctuaciones en la intensidad, como las que han ocurrido esta mañana, no son raras en huracanes intensos», señaló el centro.
En un momento dado, los meteorólogos dijeron que Lee podría volver a fortalecerse y alcanzar vientos de hasta 290 kph. Solo siete huracanes del Atlántico han tenido vientos de esa magnitud desde 1966, según el investigador de huracanes de la Universidad Estatal de Colorado, Phil Klotzbach. Entre ellos estaba el Huracán Dorian, que azotó las Bahamas septentrionales en 2019 como una tormenta de categoría 5, permaneciendo sobre pequeñas islas durante unos dos días.
El huracán Lee pasó de ser una tormenta de categoría 1 a una tormenta de categoría 5 en menos de 24 horas, de acuerdo con datos facilitados por Lee Ingles, meteoróloga del Servicio Nacional de Meteorología en San Juan. Además, dijo que las aguas cálidas y la falta de cizalladura del viento contribuyeron a la rápida intensificación.
«El huracán tenía todos los ingredientes para convertirse en una tormenta poderosa en tan poco tiempo», afirmó.
El Centro Nacional de Huracanes dijo que se pronosticaban olas peligrosas y corrientes de resaca para la mayor parte de la costa este de los EE. UU. a partir del domingo, pero que no tenía más detalles sobre qué más podría desencadenar la tormenta.
«Es demasiado pronto para saber qué nivel de impacto, si lo hay, que Lee podría tener a lo largo de la costa este de EE.UU., el Atlántico canadiense o Bermudas a finales de la próxima semana», indicó el centro.
Preparativos ante posible llegada de huracán
El jueves, el presidente de EE.UU., Joe Biden, recibió un informe con la última trayectoria del huracán y los detalles de los preparativos en marcha por parte de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés). La agencia informó que hay aproximadamente 4,5 millones de comidas y casi 8,9 millones de litros de agua disponibles en Puerto Rico, y otras aproximadamente 250.000 comidas y más de 600.000 litros de agua en las Islas Vírgenes de los EE. UU.
FEMA dijo que también ha desplegado equipos de respuesta rápida en ambos territorios de EE.UU. como precaución.
Lee es la 12ª tormenta con nombre de la temporada de huracanes del Atlántico, que va desde el 1 de junio hasta el 30 de noviembre y alcanza su punto máximo en septiembre.
La tormenta tropical Margot se convirtió en la 13ª tormenta con nombre después de formarse el jueves por la noche. Estaba ubicada a unas 1.310 kilómetros al noroeste de las Islas Cabo Verde el viernes por la tarde. Tenía vientos de hasta 65 kph y se pronosticaba que se fortalecería a huracán a principios de la próxima semana. Se desplazaba hacia el noroeste a 28 kph y se espera que permanezca sobre aguas abiertas.
En agosto, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica pronosticó entre 14 y 21 tormentas con nombre esta temporada, con entre seis y once de ellas posiblemente convirtiéndose en huracanes y de esas, entre dos y cinco podrían desarrollarse en huracanes mayores.
En el Pacífico, el Huracán Jova avanzó por aguas abiertas lejos de la costa suroeste de México y no representaba una amenaza para la tierra.
Estaba ubicado a unas 1.435 kilómetros al oeste de la punta sur de Baja California y se movía hacia el noroeste a 26 kph. Sus vientos máximos sostenidos se habían debilitado a 120 kph.