Cuando las personas hacen una pausa antes de responder a una pregunta, incluso de unos segundos, sus respuestas se perciben como menos sinceras y creíbles que si hubieran respondido de inmediato, según una investigación publicada por la Asociación Estadounidense de Psicología en el ‘Journal of Personality and Social Psychology‘. Y cuanto más dura la vacilación, menos sincera parece la respuesta.
«Evaluar la sinceridad de otras personas es una parte omnipresente e importante de las interacciones sociales —señala el autor principal, Ignazio Ziano, de Grenoble Ecole de Management, en Francia–. Nuestra investigación muestra que la velocidad de respuesta es una pista importante en la que las personas basan sus inferencias de sinceridad«.
Experimento
- Los investigadores llevaron a cabo una serie de experimentos en los que participaron más de 7,500 personas de Estados Unidos, Reino Unido y Francia.
- Los participantes escucharon un fragmento de audio, vieron un video o leyeron el relato de una persona que respondía a una pregunta simple (por ejemplo, si les gustó un pastel que hizo un amigo o les robaron dinero del trabajo).
- En cada escenario, el tiempo de respuesta varió de inmediato a un retraso de 10 segundos.
- Luego, los participantes calificaron la sinceridad de la respuesta en una escala móvil.
Resultados
En los 14 experimentos, los participantes calificaron constantemente las respuestas retrasadas como menos sinceras, independientemente de la pregunta, ya sea inofensiva sobre el pastel o más seria sobre la comisión de un delito.
Algunas condiciones redujeron este efecto, encontraron los investigadores. Por ejemplo, si la respuesta se consideró socialmente indeseable, como decir «No, no me gusta» cuando un amigo te pregunta si te gusta su pastel, la velocidad de respuesta no pareció importar mucho y la respuesta se consideró sincera, ya fuera rápida o lenta.
Los investigadores también encontraron que si las personas pensaban que una respuesta más lenta se debía al esfuerzo mental (por ejemplo, tener que recordar si había robado caramelos hace 10 años), la velocidad de respuesta tenía un efecto menor.
Implicaciones
Los hallazgos tienen amplias implicaciones, según Ziano. «Siempre que las personas interactúan, juzgan la sinceridad de los demás. Estos resultados se pueden aplicar a una amplia gama de interacciones, desde charlas en el lugar de trabajo hasta discusiones entre parejas y amigos», señala.
«Además, en las entrevistas de trabajo y en las audiencias judiciales y los juicios, las personas a menudo tienen la tarea de emitir juicios de sinceridad –añade–. Aquí, también, la velocidad de respuesta podría influir».
Propone el ejemplo de un gerente de contratación preguntando a dos candidatos de trabajo, llamados Ann y Barb, si realmente conocen el lenguaje de programación Javascript, como afirman. Ann dice que sí de inmediato, mientras que Barb responde que sí después de tres segundos.
«Nuestros resultados sugieren que en esta situación, es más probable que el gerente de contratación crea a Ann que a Barb y, por lo tanto, es más probable que contrate a Ann –explica Ziano–. En general, siempre que hay una respuesta que requiere una respuesta, como en una entrevista de trabajo, las respuestas tardías pueden percibirse como menos sinceras«.
Reacciones
Otra área en la que el tiempo de respuesta puede ser importante son las reacciones del jurado al testimonio en la corte. «Sería injusto para el personal de respuesta, como un sospechoso de un delito, si la demora en la respuesta se atribuyera erróneamente a la supresión del pensamiento o la fabricación de la respuesta cuando en realidad fue causada por un factor diferente, como simplemente estar distraído o pensativo», apunta Ziano.
El experimento final encontró que instruir explícitamente a los participantes a ignorar la respuesta retrasada redujo, pero no eliminó por completo, el efecto de la respuesta retrasada en el juicio de sinceridad o culpa.
«Sin embargo, nuestra investigación muestra que, en general, una respuesta rápida parece percibirse como más sincera, mientras que una respuesta que se retrasa incluso un par de segundos puede considerarse una mentira lenta», concluye Ziano.