Guatemaltecos señalados por corrupción en la FIFA

Tres dirigentes del fútbol de Guatemala fueron implicados hoy por corrupción en la FIFA, como parte de las investigaciones que se vienen realizando en los Estados Unidos desde hace meses.  Ellos son el presidente de la FEDEFUT,  Bryan Jiménez, Héctor Trujillo y el miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, Rafael Salguero.

Este mismo día, en suiza han sido arrestados el presidente de la CONCACAF, Alfredo Hawit y el presidente de la CONMEBOL, Juan Ángel Napout, quienes se encontraban en un hotel en Zürich. Entre los principales señalados también se encuentran el presidente de la Federación de Futbol de Honduras, Rafael Callejas y el presidente de la Federación de Futbol de Brasil, Marco Polo del Nero.

La información la ha dado este día la Fiscal General estadounidense, Loretta Lynch, quien dijo sobre el guatemalteco Trujillo –que es miembro del Comité Ejecutivo de la Federación– lo siguiente: Actualmente sirve como juez en la Corte Constitucional de Guatemala, supuestamente haciendo justicia cada día mientras aparentemente  solicita sobornos y vende su influencia en la FIFA.

Hace pocos momentos, Jiménez ofreció declaraciondes a la prensa y dijo que está tranquilo “porque están en orden todas las cuentas de los aportes que la Federación ha recibido de parte de FIFA, y que su administración ha sido transparente”.  Hasta este momento se ignora si Estados Unidos solicitará la extradición de los tres dirigentes deportivos.

La lista de los 16 funcionarios deportivos implicados en efsta nueva etapa de las investigacione es la siguiente: Alfredo Hawit; Ariel Alvarado; Rafael Callejas; Bryan Jiménez; Rafael Salguero; Héctor Trujillo; Reynaldo Vasquez; Juan Ángel Napout; Manuel Burga; Carlos Chávez; Luís Chiriboga; Marco Polo del Nero; Eduardo Deluca; José Luis Meiszner; Romer Osuna; Ricardo Teixeira.

La Fiscalía de Estados Unidos ha investigado y apresado ya a vzarios dirigentes de la FIFA, a los que se acusa de actos de corrupción, y en algunos casos, también de lavado de dinero, lo que implica delitos graves que podrían llevarlos a recibir sentencias de cárcel en aquel país, en donde deberán enfrentar a la justicia.

(*) Redacción de Fernando Villalobos y Gonzalo Marroquín, Imagen cortesía de FIFA