Tras 126 allanamientos simultáneos en cinco departamentos del país, el Ministerio Público y las fuerzas de seguridad capturan a 72 personas sindicadas de integrar una estructura criminal dedicada a las extorsiones, que, en un año, cobró Q3 millones y es responsable del asesinato de 30 guatemaltecos.
Redacción de Crónica
El golpe más grande que se ha dado a las estructuras criminales dedicadas a la extorsión, se concreta en momentos en que el gobierno del presidente Jimmy Morales, es duramente criticado por no evidenciar un rumbo definido, esto a causa de la falta de políticas públicas.
De tal cuenta que la desarticulación de la banda de extorsionistas es una bocanada de aire para una administración que no termina de generar credibilidad entre la población, y que se ha destacado más por los errores, equivocaciones y desaciertos del mandatario debido a su inexperiencia política y por ejercer el poder con opacidad, contrario a lo que esperaba la población que votó por él.
La aprehensión de los 72 sindicados de exigir pagos ilegales a empresas de transporte colectivo extraurbano, camiones repartidores, tortillerías y taxistas, no soluciona el problema de fondo, pero sí ayuda a paliar uno de los graves problemas de inseguridad que tiene efectos negativos en los ámbitos social y económico.
De hecho, el documento que contiene la política democrática del Estado, y que fue dado a conocer recientemente, señala que las extorsiones también constituyen uno de los fenómenos que ha venido en aumento en los últimos años, causando grave daño personal, familiar, económico y social. Varias muertes violentas se asocian a las mismas, las que igualmente provocan migración interna y externa, que, en muchos casos, agudiza las condiciones de pobreza de las personas víctimas de estos hechos, al tener que abandonar su trabajo, su vivienda o cualquier otra actividad comercial.
Las investigaciones del Ministerio Público y de la Policía Nacional Civil (PNC), dan cuenta de que la red delictiva, vinculada a la mara 18, había extorsionado a 2 mil 500 personas y operaba en los departamentos de Guatemala, Retalhuleu, Izabal, Escuintla y Santa Rosa. En dichos departamentos se concentra, según estadísticas del ente encargado de la persecución penal, el 58 por ciento de las extorsiones a nivel nacional.
La cantidad de detenidos en el amplio operativo, representa el 36 por ciento del total de capturas por extorsión que, según el MP, se realizaron el año pasado —200 en total—.
Mejora la imágen gubernamental
Lorena Escobar, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies), considera que el gran golpe a las extorsiones tiene varios mensajes, entre ellos, que existe coordinación entre el Ministerio Público y el Ministerio de Gobernación; asimismo, le dan un mensaje a la población, el cual demuestra el interés para combatir este flagelo.
Escobar, por su parte, afirma que el operativo se puede catalogar como una muestra de un logro dentro de estos 100 días que lleva la presente administración, tomando en cuenta que es algo visible para la población.
En este sentido, Mario Polanco, director del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM), coincide, al indicar que estas acciones demuestran la coordinación entre el Ministerio Público y Gobernación; empero, resalta que es importante que dicha coordinación se mantenga.
Sin embargo, también comenta que pareciera que existe un nivel de eficiencia en la administración de Gobierno, pero recuerda que constan otras debilidades en el Ejecutivo, como es la falta de implementación de una política de seguridad adecuada. Es un primer golpe y esto tal vez tiene que ver más con el trabajo del Ministerio Público y de la cartera de Gobernación.
Ambos expertos resaltan que, para poder combatir las extorsiones; además de combatir la desarticulación de estas estructuras, es importante incluir programas de prevención, los cuales, reconocen, conllevarán un mediano plazo.
Un buen paso
De acuerdo con Edgar Celada, investigador del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos (Ipnusac), las capturas y el golpe dado a los extorsionistas les da a los transportistas un respiro, porque, por lo menos, durante un tiempo, dejarían de padecer de las extorsiones. La acción es buena, pero no será totalmente efectiva si no se toman otras medidas a fin de evitar que otros grupos ocupen el vacío de los que fueron capturados.
Considera, además, que la acción del MP y la PNC confirma la necesidad de poner atención a fondo y con seriedad a la investigación criminal, porque, cuando esta se hace bien, conduce a decisiones estratégicas.
Por su parte, Ronaldo Leiva, experto en temas de seguridad del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), califica los resultados como un buen paso para darle seguimiento al problema de extorsiones, como al de otro tipo de criminalidad.
Los mareros solo se estaban fortaleciendo, actuando en lugares donde tenían más posibilidades de actuar y donde la gente aún tiene miedo de denunciar. Por eso se ve positivo que se actúe en las áreas que no son tan urbanas, pero que sí son lugares donde se mueve mucha plata, como la costa sur y la frontera con México.