Las selecciones de Guatemala(Mayor, Futsal y sub-20), dos clubes (Antigua y Suchitepéquez) de la Liga Nacional, y altos dirigentes del fútbol corren un inminente riesgo de quedar inhabilitados de toda competición internacional.
La CONCACAF ha enviado una carta a la Comisión Normalizadora de la Federación Nacional de Fútbol (Fedefut) en la cual advierte esta sanción severa por una posible injerencia de terceros en asuntos internos.
¿Cómo llegó este caso hasta este extremo? Hace más de un año se destapó el escándalo de corrupción en el fútbol, conocido como FIFA Gate involucró a altos dirigentes deportivos de todo el mundo. Entre los señalados se encontraba Brayan Jiménez, quien presidía la Fedefut y ahora está extraditado bajo arresto domiciliar, ya que habría participado en una red mundial de sobornos.
Este caso provocó que el máximo ente del fútbol mundial interviniera en Guatemala y nombrara una Comisión Normalizadora, presidida por Adela Camacho. La crisis parecía aliviarse con la llegada de un cuerpo técnico integrado por nacionales y con algunos resultados favorables para la selección mayor, sin embargo, estos nuevos aires podrían durar poco. Un caso de dopaje que parecía intrascendente hace unas semanas puede ser el Talón de Aquiles para la Fedefut.
En diciembre de 2015 Antigua GFC daba la campanada de la temporada tras ganar su primer título de Liga, pero lo que nadie imaginaba es que los jugadores Alejandro Díaz, Víctor Ayala, Alexander Robinson y Leonel Aroche iban a dar positivo en la prueba antidoping. El Comité Disciplinario de la Fedefut oficializó la sanción el pasado 9 de junio, la cual conllevaba la suspensión de los antigueños.
La historia no acaba acá, ya que los futbolistas afectados y accionaron contra los dirigentes de la Fedefut y no contra el Comité Disciplinario. Esta solicitud fue conocida por el Tribunal de Honor de la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (CDAG) y tramitada posteriormente. La audiencia donde están citados los dirigentes denunciados y los futbolistas suspendidos, se programó para el 02 de agosto.
Según la FIFA los entes deportivos deben ser autónomos e independientes entre sí, ya que las funciones que les competen son distintas. Es decir que aunque tengan algún tipo de relación no debe existir injerencia en los asuntos internos, como este caso de dopaje.
La comisión normalizadora expresó en un comunicado que no participaron en las muestras del análisis de dopaje y tampoco intervinieron en el caso. Según argumentan, esta decisión siempre estuvo a cargo del Comité Disciplinario.
El caso está en espera y las autoridades no han anunciado acciones futuras, pero si el máximo ente internacional comprueba la injerencia de terceros, sí habría posibilidades reales de la sanción.