Con información de yahoo México y lanacion.com
Llegó el “Día D” de la carrera hacia a la Casa Blanca. Las cuatro primarias por bando realizadas hasta ahora pueden considerarse un precalentamiento del llamado “supermartes”, donde los electores de 12 estados darán sustento al sueño presidencial de los candidatos o los mandarán a la casa.
Los grandes favoritos deberán ratificar las expectativas generadas. Entre los demócratas, Hillary Clinton llega con un fuerte impulso después de lograr un convincente triunfo el sábado en Carolina del Sur. Del lado republicano, el magnate Donald Trump busca seguir con su paso triunfal, siempre envuelto en polémicas, esta vez por el Ku Klux Klan.
Un sondeo divulgado por la cadena CNN muestra que Trump tiene el apoyo para lograr la nominación presidencial republicana de casi la mitad (un 49%) de los votantes registrados del Partido Republicano y de aquellos que se definen como independientes de tendencia conservadora.
El polémico magnate saca más de 30 puntos de ventaja a sus más directos rivales, los senadores Marco Rubio, con un 16% de respaldo, y Ted Cruz, que se lleva un 15%. Además, el apoyo a Trump ha crecido desde el anterior sondeo, realizado en enero y en el que era el favorito de un 41% de los encuestados.
Por el lado demócrata, Clinton es la favorita entre los votantes registrados del partido y aquellos independientes de tendencia progresista, con un 55% de apoyo, frente al 38% de su rival, el senador Bernie Sanders. Sanders mantiene el mismo respaldo para lograr la candidatura demócrata que tenía en el sondeo de enero, mientras que el de Clinton ha crecido levemente, al pasar del 52% al 55% actual.
El supermartes es el día en el que más estados votan a la vez en las elecciones primarias de Estados Unidos, y se reparten 595 delegados republicanos y 865 demócratas. Este año los estados que votarán en el “supermartes” son Alabama, Alaska, Arkansas, Colorado, Georgia, Massachusetts, Minnesota, Oklahoma, Tennessee, Texas, Vermont y Virginia, además de la Samoa norteamericana.
Con la interna demócrata más clara, casi toda la atención está puesta en las internas republicanas, donde la premisa de casi todos los candidatos es la misma: frenar a Donald Trump. Incluso los analistas decían que Hillary, tras su victoria en Carolina del Sur, ya empezó a enfocarse en el magnate republicano. Rubio y Cruz reconocen que el tiempo se está agotando para revertir la campaña y están apuntado todos sus cañones contra el controvertido magnate inmobiliario.
“El partido de [Ronald] Reagan está a punto de nominar a un estafador. Donald Trump no es otra cosa que un estafador de primer orden y está intentando llevar a cabo la mayor estafa”, advirtió Rubio en un acto de campaña celebrado en Purcellville (Virgina). Rubio invitó a los votantes republicanos a desenmascarar la verdadera naturaleza de Trump.
“No permitan que sus amigos voten por estafadores”, les pidió el precandidato republicano. El senador por Florida de origen cubano se presenta como el único capaz de frenar a Trump en las primarias y derrotar a Clinton, la favorita del Partido Demócrata, en las presidenciales de noviembre.