El Papa se postra en la basílica de San Pedro para la celebración de la Pasión de Cristo

Papa Francisco.- El Papa se postra en la basílica de San Pedro para la celebración de la Pasión de CristoROMA, 2 Abr. 2021 (Europa Press) –

El Papa se ha postrado en el suelo de la basílica de San Pedro del Vaticano, delante del altar, para orar durante unos minutos por la Pasión del Señor durante este viernes Santo en que la Iglesia recuerda el drama de la muerte de Cristo en la Cruz.

Francisco estaba ataviado con unas vestimentas de color púrpura en recuerdo de la sangre de Cristo derramada en la Cruz en una basílica completamente desprovista de ornamento e iluminada por una luz suave en consonancia con la sobriedad de la ceremonia.

Tras esos minutos de silenciosa oración el Pontífice se ha puesto de nuevo en pie para comenzar con la proclamación de la liturgia de la Palabra.

Debido a la situación sanitaria, se celebra en el altar de la basílica de San Pedro y participan los cardenales, los superiores de la secretaria del Estado Vaticano. En cambio, la participación de fieles ha sido muy limitada.

El Papa presidirá más tarde el Viacrucis. Un año más, la pandemia ha obligado al Santo Padre a desarrollarlo en la plaza de San Pedro y no en el Coliseo de Roma para evitar las aglomeraciones.

También pide recordar a los «crucificados de hoy»

El Papa ha pedido a los fieles que recuerden a los «crucificados de hoy», que ha ido enumerando como «los corderos inmolados, víctimas inocentes del sufrimiento y la maldad del mundo» y, en concreto, de las guerras, de las dictaduras, de las violencias cotidianas y también de los abortos-.

Así lo ha puesto de manifiesto en la audiencia general antes de comenzar las celebraciones litúrgicas del Triduo Pascual. Francisco ha pedido, además, llevar esperanza a todas aquellas personas que están pasando «muchas situaciones de sufrimiento». Se ha referido especialmente a las personas, familias y poblaciones que sufren por la pobreza, calamidades y conflictos».

El Pontífice ha presidido la catequesis desde la Biblioteca del Palacio Apostólico hasta donde se ha trasladado la celebración para evitar las aglomeraciones en la plaza de San Pedro y evitar así los contagios.

Desde allí, ha instado a los fieles a que durante el periodo de Semana Santa, que comenzó con la celebración del Domingo de Ramos los fieles pongan ante Jesús crucificado a «todos los crucificados de hoy, hermanos y hermanas, víctimas inocentes del sufrimiento y la maldad del mundo» porque «sólo Él puede consolarlos y darles amor».

Francisco también ha solicitado que, en el jueves Santo que recuerda la Última Cena, los fieles se amen haciéndose «siervos los unos de los otros, como hizo Él lavando los pies a los discípulos». Durante el Viernes Santo, que se revive el vía crucis de Cristo, reclama que lleven «en la mente y en el corazón los sufrimientos de los enfermos, de los pobres, de los descartados de este mundo». Estos son los «corderos inmolados», víctimas inocentes de guerras, dictaduras, violencias cotidianas y abortos.

Durante el Sábado Santo, que ha definido como el «día del gran silencio», ha recordado que los fieles esperan «vigilantes el cumplimiento de la Promesa de Dios, en la resurrección del Señor», que la Vigilia Pascual anuncia «con alegría desbordante». «El Resucitado, a quien encontramos en la fe, nos manifiesta que la vida triunfa sobre la muerte, el bien vence al mal y el sentido de nuestra existencia es una vida plena y de felicidad infinita junto a Él», ha concluido.