El papa Francisco, muy crítico con supuestas «apariciones» recientes de Medjugorje 

A bordo del avión del papa, Santa Sede | AFP |

El papa Francisco se mostró el sábado muy crítico con las supuestas apariciones  recientes de la virgen María en Medjugorje, un sitio que atrae cada año un millón de peregrinos a Bosnia Herzegovina, cuando regresaba de celebrar el centenario de las de Fátima.

En junio de 1981, seis niños y adolescentes bosnios contaron haber sido testigos de la aparición de la virgen María en esta pequeña localidad del sur de Bosnia. Algunos, ya adultos, aseguran que se producen apariciones cada día.

La mujer que se les aparece «no es la mamá de Jesús», lanzó el papa en el avión que lo traía de vuelta de Portugal, donde había canonizado, por la mañana, a dos de los tres pastorcitos que aseguraron haber visto a la virgen María en 1917, en Fátima.

Como las de Lourdes, en el sur de Francia, las apariciones de María en Fátima fueron juzgadas «dignas de fe» por la Iglesia, si bien años después de que terminaran.

Jorge Bergoglio, que confiesa sentir una fuerte devoción por la virgen María y se muestra más receptivo que sus predecesores a las manifestaciones de piedad popular, recordó que la investigación que se está llevando a cabo en El Vaticano ha dado lugar a «dudas» sobre las apariciones actuales en Medjugorje.

«Yo prefiero la madona madre, nuestra madre, y no la madona jefa de servicio, con gráficos y que envía mensajes todos los días (…). Esta mujer no es la mamá de Jesús», zanjó.

Sin embargo, se mostró más clemente con las primeras apariciones ante los niños, considerando que merecían que la investigación continuara.

Pero, sea o no juzgada «digna de fe» por la Iglesia, toda aparición «pertenece a la esfera privada» y cada fiel es libre de creer en ella o no, recordó el pontífice argentino.

Además, el papa subrayó que la Iglesia no puede ignorar a la muchedumbre que visita Medjugorje ni negar que los peregrinos hallen allí la fe. Hace poco le encargó a un arzobispo polaco que evalúe las necesidades pastorales de esos peregrinos.

Según estimaciones, el sitio de Medjugorje atrae cada año a alrededor de un millón de personas, un verdadero centro de interés turístico en este pequeño país, de 3,8 millones de habitantes, el 10% de los cuales, católicos.