- Trámite se hace fuera de horas hábiles en un tribunal de turno, en vez de hacerlo en el que correspondería.
En medio de una búsqueda para sostener sus acusaciones, el Ministerio Público (MP), por medio de la Fiscalía contra la Impunidad (FECI), presentó el miércoles por la noche la acusación formal en contra del periodista José Rubén Zamora, siempre bajo los cargos de lavado de dinero, chantaje y tráfico de influencias.
Zamora, quien se ha declarado como «preso político», perseguido «por el presidente Alejandro Giammattei y la fiscal general Consuelo Porras», se mantiene detenido en la cárcel de Mariscal Zavala, bajo estrictas medidas de seguridad.
El MP confirmó este jueves que presentó la acusación formal, luego de realizar una serie de investigaciones para sustentar su caso. Se sabe que han sostenido varias indagatorias, aunque no se ha establecido la procedencia ilegal del dinero incautado al acusado, quien indicó en la audiencia de primera declaración que se utilizaría para el pago del bono 14 del personal del diario «elPeriódico»
En el mismo caso, la FECI ha implicado a una fiscal de esa fiscalía, Samari Carolina Gómez Díaz, a quien se acusa de haber revelado información confidencial o reservada. Aunque la abogada dejúi su cargo en la FECI estando en prisión, el juez se ha negado a darle medida sustitutiva para que pueda dejar la prisión. Ella es madre de dos niños menores.
La FECI también arrestó a la encargada del área financiera del periódico, Flora Silva, a quien también se le ha negado la prisión domiciliaria, aunque también renunció a su cargo en el diario para llevar a cabo su defensa sin ningún tipo de compromisos.
El abogado Juan Francisco Solórzano Foppa, quien defiende a Zamora, explicó que la audiencia de etapa intermedia se ha fijado para el 8 de diciembre, aunque mostró extrañeza por la forma en que ayer se presentó en horas inhábiles la acusación formal.
Hasta este jueves dijo que no había tenido acceso a la acusación de la FECI para iniciar la preparación de la defensa.
El MP y la FECI han iniciado persecución en contra de varios operadores de justicia que se han caracterizado por su lucha contra la corrupción y algunos de ellos permanecen en prisión en medio de irregularidades, mientras que la mayoría han logrado salir del país antes de que se produzca su orden de captura y ahora se encuentran en el exilio, principalmente en Estados Unidos.
Apenas ayer, el departamento de Estado de los Estados Unidos expresó «alarma» por la forma en que la corrupción crece en el país y la labor del sistema de justicia, que suele ser complaciente en contra de los corruptos, pero persigue a los que luchan contra este mal y la impunidad que impera en el país en esta materia.