Save the Children informó este martes de un «posible aumento» de las muertes entre mujeres embarazadas y niños menores de cinco años por el colapso de los hospitales en India, resultado del deterioro de la situación de la pandemia de COVID-19.
El organismo, que tildó de «enorme» el incremento de contagios de COVID-19 en India, detalló que el aumento de la mortalidad en estos grupos poblaciones podría ser de «miles» de personas ante la falta de medicamentos y la escasez de personal sanitario.
«Están diciendo a mujeres en etapas avanzadas del embarazo que tendrán que dar a luz en casa porque todos los establecimientos de salud de sus distritos están atendiendo a pacientes con COVID-19», explicó el director adjunto de Salud y Nutrición de Save the Children en India, el doctor Rajesh Khanna.
«Nos preocupa que esto las deje en mayor riesgo de complicaciones o incluso de muerte», agregó. En referencia a la mortalidad infantil, Save the Children estima que la tasa puede incrementarse más de un 15 por ciento.
De forma paralela, la emergencia por la COVID-19 puede suponer un retroceso en los avances logrados en el país durante las últimas décadas y puede provocar que los niños y las niñas menores de 5 años no tengan acceso a vacunas y tratamientos básicos para acabar con la diarrea, la neumonía o la desnutrición aguda grave.
Alimentos básicos
Save the Children explica que se han cerrado muchos centros infantiles que anteriormente proporcionaban a los niños y las niñas comidas regulares, lo que ha dejado a muchos sin acceso a alimentos básicos. «Casi uno de cada cinco niños en la India está gravemente desnutrido y muchos de ellos necesitan tratamiento urgente», recordó el director adjunto de Salud y Nutrición de Save the Children en India, el doctor Rajesh Khanna.
Además, la organización alerta de que la situación puede empeorar «aún más» en las próximas semanas debido a que muchas personas están abandonando las ciudades hacia sus pueblos de origen porque no hay trabajo o porque quieren estar con la familia, lo que aumenta el riesgo de propagación del virus en las zonas rurales, donde la atención médica es limitada.
«Nuestros equipos nos cuentan que hay clínicas que solo tienen paracetamol para las personas enfermas y que carecen de oxígeno», precisó el doctor Khanna.
Desde el inicio de la emergencia, Save the Children está trabajando en estrecha colaboración con las autoridades de las ciudades y las zonas rurales para proteger a la infancia y las familias más vulnerables.